El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) no pudo informar este miércoles ni una sola variable central que haya arrojado buenas noticias. Entre las cifras negativas que dio a conocer se ubicó la del Producto Bruto Interno (PBI), que en el cuarto trimestre de 2018 se desmoronó el 6,2 por ciento. La cifra arrastró un acumulado que finalizó el año con el 2,5% de pérdida.
Se trata de la mayor caída desde 2009 (cuando marcó un -5,9%) y la misma que en 2014.
En tanto, el PBI desestacionalizado del cuarto trimestre de 2018 arrojó una variación negativa de 1,2% respecto del tercer trimestre.
Desde el Ministerio de Hacienda señalaron que «con el dato cerrado del PBI en pesos corrientes del año 2018, el déficit primario del mismo año pasa a ser de 2,3 puntos del PBI (antes 2,4), lo que representa una baja de 1,5 puntos porcentuales respecto a 2017″.
La mala noticia sin embargo fue transformada en buena por el siempre optimista equipo de Nicolás Dujovne, ya que apuntaron que «la caída fue menor de la esperada».
«Esto implica que la economía se encuentra mejor posicionada para encarar la recuperación, ya que el arrastre estadístico, es decir la dinámica que dejó el cuarto trimestre de 2018 a revertir en 2019″, que pasó «de -2,9% a -2,4%», dijeron sin rubor alguno.
