El ministro de Justicia, Germán Garavano, criticó las tomas de colegios en contra de la reforma educativa llamada «Secundaria del Futuro» y rechazó el fallo de la jueza en lo contencioso administrativo y tributario de la Ciudad, Elena Liberatori que establece no realizar acciones para denunciar las tomas.

«Es una ilegalidad, algo que repudio. Hay otras maneras de manifestar una protesta y generar caminos de diálogo. La toma de los alumnos, la pérdida de días de clases, no es el camino, porque perjudica a miles de compañeros», sostuvo.

Además, cuestionó el fallo de la magistrada y lo calificó de «desacertado». La magistrada hizo lugar a un amparo en el que ordenó al Gobierno porteño no enviar ninguna instrucción a los directores de escuelas que implique denunciar a la policía las ocupaciones. «La jueza tiene varios pronunciamientos en este sentido que yo no comparto. Me parece desacertado porque no se trata de reprimir a los alumnos, sino de algo ilegal, irregular», afirmó.

El conflicto entra en su quinta semana de desarrollo, y la reunión del miércoles pasado entre representantes de los centros de estudiantes con la ministra Soledad Acuña parece no haber calmado el conflicto, sino que por el contrario endureció la postura de un lado y de otro.

«Rechazamos la «Secundaria del Futuro» por su carácter inconsulto y por eso pedimos una prórroga en su aplicación. Independientemente de los puntos en discusión, como las prácticas, no permitimos que haya una profundización de la reforma anterior, que fue inconsulta, y planteamos que haya una instancia de diálogo real», explicaron durante la conferencia los estudiantes.

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