El gobierno no la tiene fácil. Este fin de semana llega la directora Gerente del organismo multilateral, Christine Lagarde y no la esperan con los brazos abiertos, más bien todo lo contrario.

La ejecutiva francesa participará de la reunión de ministros del G20 y se reunirá con el presidente Mauricio Macri y el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. Espera que el gobierno muestre señales que tiene la sartén por el mango y que puede garantizar tanto la gobernabilidad como la continuidad del proceso económico.

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En tanto, sectores opositores al acuerdo alcanzado entre el ejecutivo y el FMI piden reuniones con la número uno del organismo para expresar su malestar con las condiciones impuestas por el mismo. En esa línea, la CGT brindará una conferencia de prensa este jueves en la que reiterará su rechazo al acuerdo del Gobierno con el FMI.

La oposición a ese acuerdo fue uno de los reclamos realizado por la central obrera al convocar al paro general del 25 de junio último.

La preocupaciones en el directorio del Fondo Monetario son varias pero la más alarmante es que el gobierno de Mauricio Macri no logre conseguir la reelección en 2019 y que un gobierno de corte popular vuelva a defaultear la deuda. También encendieron luces de alarma la impericia del Banco Central para contener otra corrida bancaria, que muchos economistas ya advierten que se puede venir pronto y que la oposición no acompañe el ajuste al que se comprometió el equipo económico del presidente Macri.

Por su parte, Lagarde pidió a los países emergentes mantener la disciplina fiscal y utilizar «todas las herramientas a su disposición», incluido el tipo de cambio flexible que actúe «como un amortiguador» para ayudar a los países a capear la salida del dinero de los inversores».

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