El vicepresidente tercero de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (APYME), Gustavo Casciotti recaló hoy -en diálogo con Chiche Gelblung en Crónica-, en la pulverización de salario de los consumidores y se quejó por la falta de respuesta del gobierno ante las reiteradas propuestas formuladas por la entidad.

Venimos sorprendiéndonos día a día de cómo se viene pulverizando el poder de compra de los consumidores”, dijo y evaluó que “estas situación no es novedad, nosotros lo venimos denunciando hace tiempo en los medios. Hemos hecho presentaciones en el Congreso y en el ministerio de Producción, siempre con propuestas para encarar la emergencia y frenar el cierre diario de pymes que este gobierno desconoce en una puesta de posverdad”.

En ese marco consideró imperioso “desdolarizar” las tarifas de los servicios y de algunos commoditties para recomponer el poder adquisitivo de los consumidores.

Nuestra propuesta es, en primer lugar, modificar le cuadro tarifario. Hoy por hoy tenemos la economía doméstica dolarizada. Cada vez que estornuda el dólar automáticamente se disparan los precios de góndola. Esto achica la capacidad de compra de los consumidores de los cuales dependemos las Pymes, que somos mercado interno dependientes, explicó.

Esta situación se profundizó el 12 de agosto (luego de las decisiones de política económica post PASO) y las consecuencias las tenemos, entre otras cuestiones, en los niveles de pobreza. Hoy el Indec confirmó que 16 millones de argentinos son pobres, lo que se traduce en un 35,4 por ciento de la población. El 7,7% es indigente.

El también empresario minimercadista marplatense se refirió a la disparada de precios de los alimentos y la caída en la compra. “Desde el mismo lunes -luego de las PASO- comenzamos a recibir listas de precios con incrementos de hasta el 15%”, detalló Casciotti. “Eso no quedó allí ya que hubieron aumentos que se retuvieron, como lo demuestra el índice de precios mayorista, que creció en el mismo mes de agosto un 11% contra el 4 de la inflación minorista. Esos aumentos de precio empiezan a sentirse a partir de el día de mañana”, explicó el dirigente y reveló que este lunes comenzó a recibir por WhatsApp nuevas listas con incrementos de entre el 15 y el 20 por ciento para el 1 de octubre.

Según analizó, esto implica que la gente va con el mismo dinero a la caja del almacén o supermercado, “pero se lleva cada vez menos mercadería”.

Es evidente que la propuesta pasa por desdolarizar, no solamente las tarifas, sino también el precio de la carne, la leche y el pan, que están en clave de dólar y que impactan en la economía del consumidor”

“El gobierno tiene herramientas de política económica que van desde las retenciones hasta el tipo de cambio diferencial, pero es evidente que no está en su ideología. Por esto, cualquier medida que puedan anunciar es meramente un parche que no resuelve la cuestión de fondo, porque el problema es el modelo”, se quejó.

Un modelo divorciado de la realidad, en contra de los trabajadores, de los jubilados y de las pequeñas y medianas empresas que vemos día a día cuantas van bajando la persiana”.

Sobre la caída de ventas en el sector alimenticio explicó que en los primeros 8 meses de 2019, se vende exactamente lo mismo en valor nominal y mucho menos en unidades. “En mi rubro -alimentos- estamos vendiendo, en valor nominal, prácticamente lo mismo en los últimos 8 meses. Teniendo en cuenta la inflación acumulada en 2019, que oscila en el 30 por ciento, claramente todos vendemos menos”.

Estamos ante un modelo que no resiste mucho más tiempo pero que hoy por hoy, para los comerciantes, estamos frente a un nuevo escenario. Confiamos que a partir del 10 de diciembre este modelo cambie y con dinero puesto en el bolsillo de los consumidores, empezar a recuperar la esperanza”, concluyó. 

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