La titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, denunció hoy ante la Justicia federal que durante el macrismo ese organismo realizó tareas de inteligencia ilegal sobre políticos, periodistas y efectivos de las fuerzas.

Fuentes judiciales informaron que la interventora de la AFI hizo la denuncia ante la Cámara Federal y salió sorteado el juez Marcelo Martínez de Giorgi, junto con el fiscal Jorge Di Lello.

Concretamente, aportó un listado de personas que habrían sido víctimas de tareas de espionaje ilegal durante la gestión de Silvia Majdalani y Gustavo Arribas, número 1 y 2 respectivamente de la AFI durante el macrismo.

Las víctimas de espionaje fueron tanto políticos como periodistas, dirigentes y hasta fuerzas policiales, entre muchos otros, y son más de 80 personas las incluidas en el listado que Caamaño entregó a la Justicia.

Las actividades de espionaje fueron, al menos, desde el 2 de junio de 2016 y a través de correos electrónicos, y todo surgió al recuperar en la AFI información de un disco rígido marca Western Digital que había sido borrado.

«Las tareas de inteligencia que en este acto se denuncian no se encuentran ordenadas ni autorizadas por ningún magistrado; sólo fueron dispuestas por las autoridades del organismo que hoy se encuentra intervenido. Es así que debemos hablar lisa y llanamente de producción de inteligencia ilegal», sostiene la denuncia.

En la denuncia se alude a presunto espionaje ilegal que se habría iniciado desde al menos el 2 de junio de 2016 sobre correos electrónicos privados de al menos 80 damnificados.

Además aludió al hallazgo de «rastros digitales que dan cuenta de la conexión de dispositivos externos a este disco en los que se almacenaba información de inteligencia sobre personas vinculadas a la actividad política de nuestro país, periodistas, dirigentes, fuerzas policiales, entre otros”.

«Del análisis surge que se procedió al borrado de la información que el mismo contenía, pero ello no de manera segura, por lo que fue posible reestablecerla -con algunas falencias del sistema-, a fin de acreditar los extremos esbozados en la presente denuncia”, se agregó.

Al recuperarse los datos se detectó un «registro de conexión de dispositivos extraíbles (pen drives) en los cuales se había realizado un proceso sistémico de colección de información correspondiente a correos electrónicos privados”.

La denuncia presentada por Caamaño quedó registrada bajo el número 2916/2020 y alude a los delitos de «violación de correspondencia» y «violación del sistema informático».

La actual interventora de la AFI adjuntó el listado de titulares de correos electrónicos afectados; un total de 80 personas, entre ellos la actual Ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad y abogada de derechos humanos Elizabeth Gómez Alcorta; la vicegobernadora bonaerense Verónica Magario, y el diputado Rodolfo Tailhade.

También figuran la ex titular de la Oficina Anticorrupción en el gobierno de Mauricio Macri, Laura Alonso; el periodista Luis Majul, el ex diputado Nicolás Massot, el sindicalista Héctor Daer y el diputado nacional Mario Negri, entre otros.

Ayer, el presidente Alberto Fernández se refirió a la denuncia que presentó hoy Caamaño y expresó su voluntad de «poder entregar a cada organismo de Derechos Humanos las cosas que Cristina (Camaño) encontró de espionaje sobre ellos».

Además, en declaraciones a C5N, el jefe de Estado dejó claro que esos documentos «tienen que estar en manos de los enormes luchadores que son los organismos».

Fernández anticipó también que confirmará a Caamaño al frente de la AFI, actualmente intervenida, y destacó que se trata de «una mujer incorruptible», que jamás aceptaría que le pidan que espíe a nadie, ya que, dijo, en ese caso, «renunciaría y lo haría público».

«Tengo al frente de la AFI a una mujer con una conducta impecable, una ex fiscal que es incorruptible. Si yo le pido espíe a alguien, renuncia y lo hace público», dijo Fernández.

print