El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, sostuvo que la causa «dólar futuro» es «la historia de un disparate jurídico y de una aberración moral» afirmando que estamos ante una justicia” sorda, ciega y muda”, ante un hecho “inexistente” que se armó con “fines políticos”.

Durante la declaración que realizó vía zoom desde la Casa de Gobierno bonaerense, tras la exposición de la vicepresidenta Cristina Kirchner, pidió a los jueces de Casación “terminar con esta farsa simplemente aplicando la ley, el sentido común y el buen gusto». Lamentó que “una vez, por enésima vez haya que explicar a una justicia, sorda ciega y muda de que se trata esto”.

“No hay delito, nunca se investigó. La historia de esta causa es de una infamia absoluta”, precisó el mandatario, quien afirmó que dicha causa “ha tenido en Argentina consecuencias concretas”, porque “nació con una intencionalidad política”, al considerar que la denuncia “llego en la primera vuelta de la elección general” donde la presidencia era disputada por Daniel Scioli y Mauricio Macri.

Allí se apuntó “contra el gobierno de entonces acusándolo de un mal manejo del dólar, y generaron allanamientos de una mesa de dinero en el Banco Central que nunca existió”, enfatizó Kicillof que en ese momento se desempeñaba como Ministro de Economía.

Expresó, además, que “la causa se usó para ganar la elección y para acusar al gobierno” y “se nos acusó de vender dólar barato a nuestros amigos, operatoria” que según precisó uso el macrismo “para forzar la devaluación. Y ellos se embolsaron la plata.”, mientras nosotros estábamos embadurnados de acusaciones”.

En otro pasaje de su exposición, el gobernador sostuvo que “nunca se denunció un delito claro, se pasaron cambiando la acusación y los acusados”, recordando que “cuando (Claudio) Bonadío toma la causa, los testigos” como Lucas Llach, Martin Redrado, Alfonso Prat Gay “armaron una realidad paralela”.

print