El presidente Alberto Fernández se reunió esta mañana con el ministro de Educación, Nicolás Trotta, a los efectos de analizar la situación de la «presencialidad cuidada» en todo el territorio argentino.
Según se informó oficialmente, el Presidente y Trotta evaluaron las condiciones en las que se dan las clases presenciales en cada provincia y abordaron la situación metropolitana ante el incumplimiento del fallo de la Justicia Federal por parte de la Ciudad de Buenos Aires.
Asimismo, Trotta expuso las «alternativas» que viene desarrollando la cartera educativa «para desplegar una agenda de presencialidad administrada que permita reducir la circulación» en aquellas zonas que presenten mayor riesgo epidemiológico debido al crecimiento exponencial de casos.
La semana pasada, a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia, la Casa Rosada suspendió las clases presenciales en el Área Metropolitana de Buenos Aires por 15 días, a partir del lunes último y hasta el 30 de abril.
Esa medida fue judicializada por padres de alumnos y por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que ayer decidió desconocer un fallo judicial que ordenó establecer la modalidad virtual en todo el sistema educativo porteño, en línea con lo dispuesto por el Gobierno nacional entre las medidas sanitarias para hacer frente al exponencial aumento de casos de coronavirus en el marco de la segunda ola de la enfermedad.
El plan que por estas horas analiza el Gobierno Nacional se baso en una hoja de ruta que se habló en el Consejo Federal de Educación con los ministros de las 24 provincias. Busca bajar la circulación en el transporte público de la comunidad educativa, disminuir la cantidad de días de asistencia a clases o definir cierres parciales que seguirían un orden de prioridad.
En el Gobierno se evalúa que, en lugar de una presencia diaria como ocurre en Ciudad, se reduzca a dos o tres días de presencialidad. “Lo que se busca es no perder el vínculo con el o la docente”, resumen cerca del ministro.
Además, Fernández habilitó a Trotta para que designe a una persona como número dos del Ministerio de Educación en reemplazo de la exviceministra Adriana Puiggrós, que renunció por fuertes diferencias con el ministro. Tras casi ocho meses, Trotta le ofreció el cargo a Marisa Díaz, que hasta ahora se desempeñó como secretaria del Consejo Federal de Educación. Su lugar lo ocupará Mario Oporto.
La suspensión de clases presenciales en el AMBA
La semana pasada, a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia, la Casa Rosada suspendió las clases presenciales en el Área Metropolitana de Buenos Aires por 15 días, a partir del lunes último y hasta el 30 de abril. Esta medida fue judicializada por padres de alumnos y por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
A raíz de las nuevas restricciones se había rumoreado que el ministro de Educación había presentado su renuncia tras haber sostenido públicamente ese mismo día que no se abandonarían las clases presenciales, renuncia que fue posteriormente negada por ambas partes.