Hoy comienza el juicio por el intento de asesinato de la ex presidenta y actual vicepresidenta de Argentina, Cristina Kirchner. Tres personas se encuentran en el centro de este proceso judicial: Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo. A continuación, un perfil detallado de cada uno de los acusados.
Fernando Sabag Montiel
Fernando Sabag Montiel, de 35 años, es el principal acusado de intentar disparar una pistola Bersa calibre 32 contra Cristina Kirchner el 1º de septiembre de 2022, cuando la entonces vicepresidenta ingresaba a su domicilio en el barrio de Recoleta, Buenos Aires. En el video del incidente, se ve a Sabag Montiel apuntando el arma a pocos centímetros de la cabeza de Kirchner; sin embargo, la bala no se disparó, quedando atascada en la recámara. Inmediatamente, fue detenido por la custodia de la vicepresidenta.
Sabag Montiel nació en Brasil y vivió en Argentina desde joven. Su perfil en redes sociales muestra vínculos con ideas extremistas y grupos marginales. Actualmente, su defensa, a cargo de la defensora oficial María Fernanda López Puleio, alega que no está en condiciones mentales para enfrentar un juicio penal.
Brenda Uliarte
Brenda Uliarte, de 23 años, es la novia de Sabag Montiel y se encontraba con él durante el atentado. Se la considera coautora del intento de asesinato, ya que las investigaciones revelaron que acompañó a Sabag Montiel en la planificación y ejecución del ataque. Uliarte fue detenida pocos días después del incidente y su defensa está en manos del abogado Alejandro Cipolla.
Uliarte, también conocida como «Ámbar», trabajaba vendiendo copos de azúcar en la calle, lo que dio origen al apodo de la «Banda de los Copitos». A través de mensajes y videos recuperados por la investigación, se evidencia su participación activa en la preparación del atentado.
Nicolás Carrizo
Nicolás Carrizo, de 27 años, es señalado como un partícipe secundario en el atentado. Se lo acusa de haber coordinado con Sabag Montiel y Uliarte en las vigilias que realizaron en apoyo a Cristina Kirchner en la esquina de Juncal y Uruguay. Carrizo era el líder del grupo de vendedores de copos de azúcar y su implicación se basa en comunicaciones interceptadas donde se discutían detalles del ataque.
Carrizo sostiene su inocencia, afirmando que no tuvo conocimiento previo del plan de asesinato. Su defensa está a cargo del abogado Gastón Marano, quien argumenta que Carrizo solo tenía una relación laboral con los otros dos acusados y que no participó en la planificación del atentado.
El contexto del atentado
El intento de asesinato ocurrió en un momento de gran tensión política en Argentina, cuando Kirchner enfrentaba un juicio por corrupción en la denominada Causa Vialidad. Sabag Montiel, Uliarte y Carrizo fueron parte de las vigilias en apoyo a la vicepresidenta, utilizando la venta de copos de azúcar como fachada. El juicio por este intento de magnicidio se espera que dure entre seis meses y un año, con casi 300 testigos citados, incluyendo a Cristina Kirchner. (NA)
