En una nueva muestra de intolerancia, odio y venganza, y en el marco de la celebración del 204 aniversario de la Independencia, una horda de militantes anticuarentena atacó el móvil de C5N que cubría la irresponsable protesta en Obelisco. En días en que el COVID-19 se disemina sin freno en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano, los profetas del odio vuelven a poner en jaque a la sociedad, vulnerando el derecho a cuidar la salud y a informar e informarse.
«Se tienen que morir todos los de C5N», gritaban desenfrenados al tiempo que violentaban brutalmente al equipo de noticias.
Afortunadamente, colegas de otros medios que también cubrían la protesta ayudaron al equipo de C5N a retirarse del lugar antes que hubiera que lamentar lesiones graves o algo peor.
La policía de la Ciudad nunca apareció a asistir a los periodistas.
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Escoria macrista, esperemos que ahora el virus haga su trabajo.
Yo creo que la violencia viene por nuestra cultura donde reina la competencia, cosa que se cultiva desde la escuela primaria y que debería cambiarse alentando a la solidaridad. Yo tengo que ganarle al otro, y si el otro me gana lo odio y si puedo lo golpeo para descargar ese odio, así pasa en todo siendo más grave en la política porque se lucha por ganarle al otro pero no se piensa en el País que somos todos los habitantes, porque un País sin habitantes, es un sitio baldío. En el fútbol también, se trata de ganarle al otro solamente sin tener en cuenta la esencia del deporte, cuerpo sano mente sana como decían los antiguos pensadores. Cuando te compras un cero kilómetro, el vecino te felicita con un dolor en el pecho, porque todos quieren tener el mejor auto.
Pregunto ¿porqué al estudiante de mayor promedio se lo abandera en los actos escolares? ¿es responsable ese estudiante de ser más inteligente que el resto, o es una propiedad de nacimiento simplemente?
¿No sería muy bueno que el inteligente colabore con el menos inteligente y éste acepte esa ayuda sin ningún complejo o sentimiento de odio? El abanderado debería ser por sorteo, así se evitaría incentivar la soberbia al elegido y bronca al resto.
Vimos a muchos protestar apoyando a alguien que les robo, como el caso Vicentin que hizo un daño económico al Banco Nación que es nuestro. Hay que cambiar los planes de estudio desde el primario y acabar con la competencia que es lo opuesto a la solidaridad.