El ex senador y candidato a vicepresidente de Macri, ensayó una rara analogía respecto de las decisiones judiciales que se debaten por estas horas en la sociedad vinculadas a la liberación de presos en el marco de la pandemia del coronavirus.
Según evaluó, la liberación de presos que algunos jueces vienen dictando en el marco de la emergencia por coronavirus «es una tara del kirchnerismo».
«Es una tara del kirchnerismo de repetir hechos históricos. Es una tara que se convierte en parodia, porque la libertad de guerrilleros en el 73 tenia un sentido épico», dijo al comparar con el indulto que firmó el ex presidente Héctor Cámpora para otorgar la amnistía y liberar a los presos políticos de aquella época.
Por el contrario, señaló que «esta liberación de violadores, de delincuentes peligrosos, de narcotraficantes, se inscribe en un reclamo patético de los ultragarantistas en la Argentina, de los sectores ligados a los Derechos Humanos, y de algunos personajes que opinan sobre el derecho penal con un sentido de anarquía».
Lo que el ex senador no dijo en sus reflexiones, es que este derrotero de prisiones domiciliarias inició con el procurador general bonaerense, Julio Conte Grand, hombre de extrema confianza de María Eugenia Vidal, que firmó una resolución alentando a los integrantes del Ministerio Público a recurrir en la búsqueda del ‘arresto domiciliario’ para la población de riesgo por COVID-19 alojados en cárceles.
Para el ex senador justicialista, «los presos tienen que quedarse en la cárcel y cumplir la condena», y opinó que «dejarlos en libertad es un verdadero disparate».
En declaraciones a FM Milenium, Pichetto desestimó que pueda tomarse como modelo de referencia las medidas que se vienen llevando adelante de otorgar prisión domiciliaria a presos con condenas en países del Primer Mundo.
«Ahí tienen gente que controla, la Argentina no tiene capacidad de controlar a nadie», enfatizó.
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