Centenares de personas realizaron hoy un homenaje por el quinto aniversario de la muerte del fiscal Alberto Nisman en la ciudad de Buenos Aires, en el que participó su madre, Sara Garfunkel, junto a algunos dirigentes de Juntos por el Cambio, y durante la convocatoria se leyó un documento titulado «Justicia perseguirás. No fue un suicidio, fue un magnicidio».
El acto fue convocado en redes sociales de Internet por Juntos por el Cambio, conformado por el PRO, la UCR y la Coalición Cívica, y se hizo en Plaza Vaticano, en el barrio porteño de Tribunales.
En el acto no participó la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), pero estuvieron la diputada por Cambiemos María Luján Rey y el ex secretario de Derechos Humanos de Macri, Claudio Avruj, quien dijo en declaraciones a la prensa que «necesitamos seguir abonando la democracia» y destacó que «este tipo de encuentros de la gente reclamando justicia, son muy importantes».
Los manifestantes portaron banderas argentinas, algunas con cintas negras, y carteles con reclamos de «justicia» por la muerte del fiscal y leyendas como «Argentina tiene hambre de democracia».
«Un hecho criminal de este tipo no puede ser interpretado fuera de contexto. Alberto Nisman anunció que iba a presentar pruebas contra la entonces presidenta de la Nación (Cristina Fernández de Kirchner) como principal encubridora de los responsables del atentado a la AMIA y, cuatro días después, apareció muerto», señala en unos de sus primeros párrafos el texto leído en la Plaza Vaticano
Y en ese sentido, los convocantes agregaron: «Nadie que se crea dueño de una verdad se suicida, nadie que tenga semejante entusiasmo vital se quita la vida». (Télam)