El precandidato a presidente del PJ-Unidad Ciudadana, Alberto Fernández, aseguró este domingo que el comienzo de la campaña del presidente Mauricio Macri fue «sentar a la ex presidenta en el banquillo de los acusados».
En diálogo con el periodista Mauro Viale, Fernández detalló la compleja maniobra de corrupción que puso en marcha el macrismo, que no por disimulada es menos importante que los clásicos mecanismos de sobreprecios en obra pública que se vienen empleando desde siempre en nuestro país.
El precandidato a presidente explicó que desde su espacio están convencidos que durante la campaña electoral hasta octubre el presidente «Macri va a pivotear sobre dos andariveles». «El primero, diciendo que él hizo lo que nosotros no hicimos. Eso no es cierto, macanea. El segundo andarivel es el de la corrupción y, en ese punto lo que quisiera es que Macri le diga a los argentinos su modo de corrupción», afirmó.
Fernández puso como ejemplos los casos de dinero que funcionarios tendrían en el exterior y el tema energético. «Le dio a sus amigos, como Nicolás Caputo, el negocio energético garantizándoles tarifas dolarizadas», dijo al tiempo que llamó a los «jueces a trabajar de jueces».
Las afirmaciones del dirigente peronista vinieron a cuenta de las preguntas de su interlocutor quien lo consultó por las causa que investigan presuntas maniobras teñidas de corrupción que involucran a su compañera de fórmula, Cristina Fernández de Kirchner.
«Puede ser altanera, soberbia, tener defectos que yo mismo le critiqué, pero ladrona no es», dijo en forma contundente.
Al referirse al juicio oral que empezó la semana pasada con la ex presidenta escuchando las acusaciones sobre ella y otros funcionarios de su gobierno en la causa que investiga presuntos delitos de corrupción con la obra pública de Santa Cruz, Fernández reiteró que «Cristina no está involucrada».
«No voy a decir que no hubo corrupción cuando tenés un ministro de Obras Públicas con 9 millones de dólares en el baúl del auto, porque no soy idiota. Los hechos pueden haber ocurrido, pero no hay nadie que haya involucrado a Cristina», afirmó.
«Dicen que Cristina tiene que saber lo que pasa en el Estado, pero qué, Paolo Rocca no sabe lo que pasa en Techint…», preguntó de manera retórica Fernández al intentar trazar una vez más un paralelismo entre la gestión kirchnerista y la de Macri.
«El comienzo de su campaña política (por Macri) fue sentar a Cristina en el banquillo de los acusados», aseguró Fernández en alusión al impacto que tuvo la foto de la ex presidenta en la sala del Tribunal Oral Federal 2, en la primera audiencia del juicio realizada la semana pasada.
Según había adelantado antes a Infobae sobre la inocencia de Cristina: «Definitivamente podía no saber (sobre hechos de corrupción). Lo que hay es un plan sistemático de mentir para incluirla a Cristina en un falso plan sistemático de corrupción».
Respecto de su perfil como eventual presidente, Alberto Fernández remarcó: «soy peronista, en materia de derechos individuales soy un liberal y en materia de economía soy un heterodoxo progresista, porque creo que la economía debe estar al servicio de la gente»; dijo.
«Cristina hoy no me necesita para ganar» pero «yo fui muy amigo de Cristina, no saben lo que me dolió separarme y la alegría que tengo de recuperar la relación», aseveró sobre la elección de su persona para encabezar la fórmula.
«Demos vuelta la página y empecemos a trabajar juntos», dijo Fernández al dar cuenta de cómo había sido el diálogo con la ex presidenta cuando le propuso que encabece la fórmula.
«Vamos a volver y ser mejores», reiteró el ex jefe de Gabinete.