En el marco de las recorridas que viene realizando la ex jefa de Estado en territorio bonaerense, hoy fue el turno a una Pyme textil – uno de los rubros más golpeados por el modelo macrista – en la localidad de Moreno donde conversó con los trabajadores y titulares de la firma Scalter SRL, para interiorizarse de las problemáticas que atraviesan y delinear un plan de acción para revertir el rumbo de la economía.
La empresa, según relataron, es un emprendimiento familiar que que nació a mediados del siglo pasado y se dedica a la producción de telas tejidas y no tejidas.
Golpeada por la crisis del 2001, la fábrica debió desprenderse de buena parte de su personal, quedando con tan solo 12 trabajadores para una producción de apenas 20 toneladas anuales.
Con la llegada del kirchnerismo y la reindustrialización, las pymes nacionales volvieron a crecer y en el caso de Scalter SRL para el año 2007 ya había más que duplicado su producción y adquirido nueva maquinaria para la producción, alcanzando las 50 toneladas anuales que se convirtieron en 400 toneladas para 2015, en pleno auge de la industria nacional.
Gracias a las políticas de incentivo a las pymes, la textil logró emplear una nueva familia de trabajadores que para ese año ya superaban los 100 empleados, explicaron sus dueños a Cristina.
La fábrica volvió a exportar en 2008, teniendo a Brasil como su principal comprador.
Sin embargo, con la llegada de Cambiemos al poder, todo se desmoronó y la baja en el consumo desplomó la producción textil alcanzando una alarmante caída del 20%.
«Seguimos cobrando lo mismo y no llegamos a fin de mes. Los salarios están por debajo de la inflación y hay compañeros que no pueden pagar la luz y el gas», sostuvo Ramón, uno de los trabajadores que dialogó con Cristina. «Y ahora dicen que van a aumentar el IVA», agregó.
«Hay que darle un trato especial a las Pymes, pero sobre todo hay que tener amor por la industria nacional», dijo Cristina.
«Hay que ponerle límites. Las elecciones sirven para que la gente le de un mensaje al gobierno. Hay que marcar que el camino que tomaron es incorrecto y que el conductor está equivocado», afirmó Cristina.
Además agregó: «Yo siento que íbamos por una Autopista. Todos íbamos por el mismo camino. Como en toda autopista había autos más modernos, otros más antiguos, algunos embotellamientos, pero íbamos todos por la misma autopista. Ahora salieron de esa autopista y entraron a una ruta de una mano, un camino equivocado en el que ya hay ripio. El conductor tiene que advertir las señales que las cosas van mal».
«Un ejemplo es la pyme que hoy visitamos y el mito de la competitividad. Ellos ganaron una licitación para vender bolsas a Carrefour a una empresa de Vietnam», dijo la candidata de Unidad Ciudadana.
Hoy, luego de los tarifazos la empresa debió afrontar facturas que tuvieron aumentos exponenciales, comprometiendo seriamente la estructura de costos de la fábrica. El incremento en el costo de energía pasó de $500 mil a 1 millón y en gas de $10 a $50 mil.
Tristemente, Scalter SRL tiene hoy nuevamente una situación similar a la de 2001 con una capacidad ociosa del 30%, según relataron sus titulares a la exmandataria.
Así llegaba Cristina a Moreno….
En camino a Moreno, a visitar una pyme textil… pic.twitter.com/7jntFu5sc0
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) 25 de julio de 2017