El diputado por el Frente Renovador, Marco Lavagna, manifestó que «primero tenemos que conocer la propuesta, que todavía no se conoce. Nos falta el detalle fino de la propuesta y ver todas las implicancias que tiene y sobretodo ver los mecanismos, los recaudos que el gobierno ha tomado para que esto se cierre definitivamente«.
En la misma línea, se expresó el diputado por el Partido Socialista, Hermes Binner: «Todavía no sabemos si vamos a votar a favor del acuerdo porque hay muy pocos datos«.
Hasta ahora, los únicos que anticiparon cuál será su voto, fueron la diputada por la Coalición Cívica, Elisa Carrió, quien dijo «voy a votar a favor del acuerdo con los fondos buitre«, y su par por el Frente para la Victoria (FpV), Diana Conti, quien señaló que ese bloque votará en contra.
«No vamos a modificar la Ley Cerrojo ni la de Pago Soberano. Asumimos un compromiso cuando fuimos gobierno, con los ahora «hold in», y no vamos a darle al gobierno un cheque en blanco para endeudarse. Ya sabemos lo que es la deuda eterna. No vamos a cambiar lo que es el camino hacia el desendeudamiento con inclusión social«, explicó Conti.
Por el Partido Justicialista, el exintendente de La Matanza, Fernando Espinoza, aseguró que «tenemos que ver es la letra chica de ese acuerdo, tendría que venir -el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso- Prat Gay a las cámaras a explicar ante taquígrafos el acuerdo. Después vamos a tomar la decisión de si está bien el acuerdo o si es demasiado. No vamos a permitir que se perjudique a la Argentina, pero vamos a escuchar«.
Por su parte la Izquierda también se mostró bastante crítica al acuerdo. Sus referentes se negaron a ingresar al recinto para manifestar su rechazo a la negociación que el Gobierno llevó adelante con los fondos buitre.
«Es el equivalente al pacto Roca-Runciman«, cuestionó el diputado por el Partido Obrero, Néstor Pitrola.Myriam Bregman, del Partido de los Trabajadores Socialistas, calificó al acuerdo como «una vergüenza«.
Cabe recordar que esta semana el Gobierno enviará al Congreso un proyecto de ley que permita ejecutar estos acuerdos y también el Parlamento deberá derogar las leyes de Pago Soberano y Cerrojo. Lograda esta instancia, se emitirán bonos, ya que, según aclaró Prat Gay, «no vamos a usar reservas efectivo». A los bonistas se les pagará en efectivo, pero con lo obtenido por la emisión de nuevos bonos. El ministro consideró que al no entregar directamente a los holdout bonos, sino efectivo, será posible colocar deuda a precios de mercado.