Se cumplen 20 años de uno de los momentos que marcaron el inicio del final de la presidencia de Fernando de la Rúa: el anuncio del «corralito». Fue precisamente el sábado 1 de diciembre, en la voz del por entonces ministro de Economía Domingo Cavallo, quien mediante una conferencia de prensa relizada desde la Quinta de Olivos, daba a conocer la decisión de congelar los depósitos en dólares existentes en los bancos.
Con el riesgo país rompiendo la barrera de los 3300 puntos, la semana cerraba caliente en la city porteña y las versiones y corridas eran parte de un ecosistema financiero repleto de desconfianza por parte de los ahorristas.
La medida adoptada por Cavallo determinaba que todos los depósitos en dólares -unos 16.000 millones en cajas de ahorro y cerca de 42.000 millones en plazos fijo- no podían retirarse en efectivo -solo podían sacarse 250 pesos por semana- y quedaban cautivos dentro del sistema.
La única manera de operar con la moneda estadounidense era a través de operaciones que no implicaran algún giro de dinero al exterior como una compra o venta, vía transferencia, evitando así que el dinero saliera del sistema financiero.
Asimismo, todos aquellos plazos fijos previamente establecidos, se mantenían congelados y regresaban nuevamente a sus cuentas, una vez llegado el vencimiento correspondiente.
El 3 de diciembre, la publicación del DNU 1570 en el Boletín oficial oficializaba el comienzo del «corralito», el puntapié para salir de la convertibilidad un tiempo después -con la sanción de la Ley de Emergencia Económica del 6 de enero de 2002-, y el inicio de una crisis económica, institucional y social que terminó con los tristes sucesos del 19 y 20 de diciembre -represión con más de treinta muertos- y la renuncia y posterior salida de la Casa Rosada -helicóptero mediante- del expresidente Fernando de la Rúa. (Diario Popular)
