La vedette y panelista Cinthia Fernández recibió una catarata de críticas en las últimas semanas luego de que anunciara su precandidatura a diputada en las próximas elecciones del 12 de septiembre por Unite por Buenos Aires, partido Vocación Social.
Conocida por sus bailes sensuales y por sus escándalos con su expareja y padre de sus hijas, el futbolista Matías Defederico, se le remarcó que no aportó ideas ni proyectos, y que hacía uso de su cuerpo para captar la atención (y posibles votos).
En la tarde del miércoles, a modo de cierre de campaña, Cinthia no hizo un acto ni dio un discurso, tampoco dio una entrevista o participó de un debate. Hizo lo que sabe hacer: bailó frente al Congreso de la Nación, se despojó de la ropa (con una clara intencionalidad que ella misma cuenta) y cantó (o hizo la mímica) su propia versión del tango-milonga «Se dice de mi» que hizo tan reconocida a Tita Merello.
«¿Querían propuestas acá tener ESTA… canción! (sic) Ya estoy escuchando, las frases armadas como: mira la diPUTAda, mira la trolA, mira la hueca y payasa que no sabe hacer otra cosa, que país generoso! ,ridícula!, ??que podes esperar de esta, que vergüenza de madre que van a decir tus hijas , es lo único que sabe hacer…», publicó -textual- Fernández en su Instagram donde estrenó el video.
En su descargo, dijo que «el culo simplemente es un culo, una excusa que escandaliza selectivamente a gente sin argumento para agredir y juzgar y querer establecer que un culo bonito desactiva neuronas» y agregó que «mi culo es solo un anzuelo para captar su atención» y «es una simple y barata estrategia en campaña».
«Seamos realistas, nadie te va a votar porque tenés un buen culo y le gustas! NO! Eso dejáselo a los políticos que quieren GARCHAR y te van garchando con sus gestiones», sentenció enojada. «Celebro mostrar el CULO porque al menos así se viraliza y escucha UNA CAUSA que a pocos le importa. Y si este domingo pierdo, ojalá que los que ganen puedan ocuparse de este tema, y me pongo a disposición de manera desinteresada ayudar que ASÍ SEA», finalizó.
Su causa, dice, es la de «las madres y minorías de hombres en los juicios de alimentos», tal como le tocó vivir cuando se separó del exjugador de Huracán.
Como era de esperar, con más de 5,2 millones de seguidores, Fernández acumula cientos de mensajes; entre quienes la apoyan hay muchas colegas del mundo del espectáculo mientras que la gran mayoría critica las formas que eligió para buscar acceder a una banca.