Caputo llegó hoy a los Estados Unidos, para asistir a la reunión que tendrá lugar el miércoles por la tarde en las oficinas que el «Special Master» posee en el rascacielos ubicado en el 245 de Park Ave, en la zona de la «Gran Manzana», según confirmaron a Télam fuentes del ministerio de Economía.
El encuentro será el primero que el funcionario argentino mantendrá con los representantes de los fondos buitre que demandaron al país, entre los que se encuentran NML y Aurelius.
Mientras continúan los trabajos por definir al nuevo estudio de abogados que llevará adelante la reanudación de las negociaciones con los holdouts, el gobierno estará representado en esta oportunidad por el abogado Lee Buchheit, de Cleary Gottlieb Steen & Hamilton, especialista en administración de deuda soberana y reconocido por su trabajo en la reestructuración de la deuda griega.
Con Pollack, ésta será la tercera reunión desde que Caputo asumió la Secretaría de Finanzas.
Antes de que finalizara el año, el 21 de diciembre, Caputo llevó adelante un intercambio «constructivo» de una hora de duración con el «special master», junto a quien acordó «comenzar negociaciones sustantivas» con los holdouts, según informó entonces el mediador designado por el juez Griesa.
El primer encuentro, concretado durante la segunda semana de diciembre a pedido de Caputo, había sido «de naturaleza introductoria», con el objetivo además de transmitir la «intención de la nueva administración» en Argentina de iniciar las negociaciones «rápidamente», detalló tras la reunión un comunicado de la oficina de Pollack.
El diálogo con el mediador permanecía paralizado desde julio de 2014 cuando el entonces ministro de Economía, Axel Kicillof, criticó el desempeño de Pollack al considerarlo imparcial, luego que éste emitiera un comunicado de prensa en el que posicionó a la Argentina en situación de «default» por el bloqueo en el esquema de pagos dispuesto por Griesa.
Eso hizo que el país no pudiera cancelar deuda con los bonistas reestructurados
Así, el miércoles la oficina de Pollack será nuevamente el escenario donde tendrán lugar las negociaciones con los tenedores de bonos que compraron títulos en default y luego demandaron al país en los tribunales estadounidenses, por una suma que actualmente asciende a los 10.000 millones de dólares.