Los ministros de Seguridad de Nación y provincia de Buenos Aires mantuvieron una reunión secreta con el prófugo Martín Lanatta

El escándalo por el erróneo anuncio oficial de que habían sido capturados los tres prófugos dejó en segundo plano otra seria irregularidad: según denunció el ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández, el detenido Martín Lanatta habría mantenido un encuentro a solas con los ministros de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y de la provincia, Cristian Ritondo, en una escala durante su traslado a Buenos Aires. “Es el amateurismo más grande que se ha visto en años. Esta actitud va a tener consecuencias penales porque un detenido está a disposición del juez, de su custodia y de su abogado, no de los funcionarios públicos”, dijo Fernández.

“Están jugando al policía, y el Estado no puede jugar al policía, no se puede trabajar con el amateurismo que están mostrando”, agregó el ex funcionario, quien basó su denuncia en las transmisiones periodísticas del sábado pasado, que informaron en vivo sobre el encuentro de los funcionarios con el condenado por el triple crimen de General Rodríguez.

Fernández sigue muy de cerca el caso después de haber sido involucrado por Lanatta desde la pantalla de Canal 13, en plena campaña de las últimas elecciones. “Quien asistió económicamente a los criminales en su fuga es cómplice de narcotraficantes”, publicó en su cuenta de Twitter, apuntando a la producción del programa PPT.

“Que el asesino se reúna con dos ministros de Cambiemos en forma secreta tendrá consecuencias penales”, advirtió Fernández también en la misma red social, dirigiendo su denuncia contra Bullrich y Ritondo que habían sido apuntados por periodistas santafesinos como partícipes de una conversación informal con el condenado recapturado cuando bajó del helicóptero que lo trasladó.

En la conferencia de prensa que ofreció el sábado, para explicar la falsa información oficial que se había brindado inicialmente, la ministra Bullrich no desmintió el diálogo con Lanatta. Cuando fue consultada sobre el contenido del encuentro, se limitó a responder que no podía dar esa información.

“Es muy grave que ministros de seguridad de Provincia y Nación se hayan reunido a solas con el detenido sin abogado ni juez”, recalcó Aníbal Fernández.

El ex ministro se refirió también a otros datos conocidos tras la captura del jefe de los prófugos, después de un vuelco en la camioneta en la que escapaba. Fernández destacó que en el vehículo “que volcó Lanatta se hallaron dos valijas con dinero” y se preguntó si no se trataba “del pago de PPT por la nota en el penal”, difundida el año pasado. El ex candidato a gobernador del FpV apuntó que era “imperativo investigar si las valijas con dinero en la camioneta provienen de la producción de PPT”. También destacó: “Clarín dice que un equipo de ocho abogados encara la `millonaria’ defensa del asesino Lanatta. Cuántos recursos para un condenado”. En la misma línea hizo referencia a las declaraciones de una de las víctimas de los prófugos en su huida, quien aseguró que tenían “fajos de dólares”, y se preguntó para reforzar sus argumentos si no serían “los que cobraron por la entrevista con (Jorge) Lanata que permitió a (la gobernadora bonaerense de Cambiemos, María Eugenia) Vidal ganar la provincia”.

“Cambiemos se benefició con la porquería de Jorge Lanata y están mostrando su amateurismo para gobernar”, señaló a este diario el ex funcionario de Cristina Fernández de Kirchner. Desde Twitter, Fernández apuntó además al “periodista de PPT (Nicolás) Wiñazki, vinculado personalmente a la dueña del campo donde cayó uno de los delincuentes”, levantando aún más el manto de sospechas sobre la relación entre la fuga y el programa de TV. “A esta altura los delincuentes tienen más vinculaciones con los periodistas Wiñazki y Lanata que las que les inventan conmigo”, insistió.

Finalmente, Fernández hizo foco en la comunicación fallida del gobierno macrista de haber encontrado a los tres prófugos cuando en realidad era sólo uno. “¿Quién le mintió al gobierno nacional?”, se preguntó. “Peor aún, ¿cuán enorme debe ser la incapacidad para que difundan la mentira?”.

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