Desde Mar del Plata, al participar del 55º coloquio organizado por la entidad que reúne al sector empresarial de todo el país, Roberto Lavagna realizó un balance sobre los últimos ocho años “de estancamiento económico” y se dirigió a la dirigencia empresarial al señalar que tienen una “tendencia a coincidir con el gobierno de turno”.
“Hay países que aprendieron a apoyar a gobiernos que representan una paleta de grises y no de ideologías opuestas como las que tenemos hace ocho años”, introdujo el candidato a presidente, para luego completar: “Siempre pareciera que estamos dispuestos a ayudar al ganador y a veces no hay que hacerlo”.
La disertación de Lavagna, que se extendió durante más de 20 minutos, comenzó con el candidato ironizando sobre el corto tiempo de exposición con el que contó en el debate presidencial y que admitió haberse sentido “incómodo”: “Hoy no hay relojito con límite de tiempo, a lo mejor así podemos hablar en serio sobre los próximos cuatro años”.
Luego, el candidato a Presidente sostuvo que “siendo optimista, llevamos ocho años de estancamiento, con los últimos dos con caída del producto en el orden del 3%”, y advirtió que “no lo tomamos como algo excepcional, sino que nos acostumbramos a todo”.
En este sentido, pidió reflexionar por qué, como sociedad, no reaccionamos “ante 32 trimestres sin crecimiento”, y se preguntó: “¿Hacia dónde miramos en un país que tiene recursos naturales, humanos y de capital, pero que no crece?”. Lavagna responsabilizó de esto a los “últimos dos gobiernos, con políticas diametralmente opuestas, pero con los mismos resultados: cero crecimiento”.
Por ello, el candidato agregó que “el ciudadano común tiene bastantes dificultades para sobrevivir como para que además lo responsabilicemos por esto”, por ello apuntó también a la dirigencia política: “Hay un capítulo político y otro económico a los cuales mirar. Quien asume el gobierno, lo asume con la sensación de que tiene todo el poder y para siempre”, en tanto que, respecto a lo económico, indicó: “Hemos estado en permanente pendularidad entre gobiernos populistas con mucha intervención, y gobiernos como el actual que apenas tienen una preocupación financiera, sin mirar la producción y el trabajo”.
“Hay países que aprendieron que en el medio de dos gobiernos hay grises. Nosotros parece que no lo aprendimos y tenemos una tendencia a coincidir con el gobierno de turno. Siempre pareciera que estamos dispuestos a ayudar al ganador y a veces no hay que hacerlo”, declaró al referirse a la dirigencia empresarial. Y añadió: “Hay conductas que no permiten que el país crezca. Si nos animamos a modificar las conductas, tenemos todo lo necesario para que el país crezca 4% por año”.