Los seis candidatos que compiten este domingo por la sucesión de Cristina, cerraron sus campañas. Los tres que llevan la delantera renovaron su compromiso y subieron la apuesta de cara a captar la mayor cantidad de votos el próximo domingo. Stolbizer, Del Caño y Rodriguez Saá se conformaron con imponer sus temas en la agenda pública.
Por el lado del oficialismo, el candidato a Presidente del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, y su compañero de fórmula, Carlos Zannini, encabezaron el acto de cierre de campaña en el mítico estadio Luna Park.
Al tomar la palabra, Scioli agradeció a todos los asistentes y a los jefes de Estado latinoamericanos con quienes se reunió en las últimas semanas. «Muy especialmente gracias a la Presidenta de la Nación, la doctora Cristina Fernández de Kirchner porque el 10 de diciembre recibiremos un país ordenado, desendeudado y con paz social», remarcó.
«Gracias al pueblo argentino representado en los que hoy están aquí. Gracias a los trabajadores y a las organizaciones sociales y gremiales. A los empresarios y emprendedores. A los médicos, enfermeros, bomberos voluntarios y a los pilotos de Aerolíneas Argentinas», agregó.
«El próximo domingo la Argentina va a decidir integrarse cada día más. Hoy más que nunca reafirmo mi compromiso que mi prioridad serán los humildes, los trabajadores y la clase media. Incentivando el mercado interno y el consumo popular, pilares de este modelo. Por eso me comprometo a modificar el Impuesto a las Ganancias. Un trabajador o jubilado que gane menos de 30 mil pesos netos de bolsillo no va a pagar este impuesto», anticipó el gobernador bonaerense.
«Esto se suma a mi compromiso de devolver el IVA a jubilados y beneficiaros de programas sociales. Tenemos un compromiso con la mejor distribución del ingreso. Vamos a promover la creación de nuevos puestos de trabajo».
«Voy a sumar cada vez más ciencia y tecnología a la producción y vamos a salir a buscar las inversiones estratégicas que nos permitan mayor sustentabilidad para el proyecto. Vamos a expandir los créditos hipotecarios, cada vez menos inquilinos y más propietarios. Vamos a construir 1 millón de viviendas», subrayó Scioli.
«Argentina va a ser un paraíso productivo. A producir y producir para que vivamos cada vez mejor. Yo sé qué hacer y cómo hacerlo. Elegí a mi equipo por la experiencia y su idoneidad.Demostré quiénes van a integrar mi Gobierno porque la gente merece saber cuáles son mis prioridades«, agregó.
Por otro lado, pidió: «El domingo vayan a buscar el voto útil en favor de la Argentina que va con el Frente para la Victoria que ha hecho resurgir a la Argentina».
En tanto, en Tigre, Sergio Massa, candidato por UNA, cerró su campaña con un acto repleto, en el que lanzó duras críticas al Gobierno y aseguró: «Si nos ponen en el balotaje se termina el kirchnerismo en la Argentina», desde el escenario principal, acompañado por su familia; el gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota y el candidato a gobernador bonaerense, Felipe Solá, entre otros.
Massa prometió además que va «a bajar un 30 por ciento la presión de los impuestos en cuatro años». Y agregó: «En cuatro años, vamos a bajar a menos de 5 puntos la inflación en la Argentina».
Por el lado de Cambiemos, Macri decidió cerrar con un acto en la ciudad de Córdoba para dar por terminada la campaña electoral antes de las elecciones del domingo.
«Quiero pedirles a los cordobeses que nos ayuden a hacer un cordobazo del crecimiento, del desarrollo», indicó el candidato de Cambiemos, frente en el que compitió con el radical Ernesto Sanz y la líder de la CC, Elisa Carrió, quienes los precedieron en el uso de la palabra. «A partir del 10 de diciembre hay un solo equipo: me comprometo a unir a los argentinos»
Macri aclaró que el partido que integra no está «en contra de nadie, sino a favor del futuro». Pero se inclinó por mencionar lo que no estaba dispuesto a hacer en lugar de repetir o ampliar sus propuestas.
«No estoy dispuesto a hablar y no escuchar«, dijo, antes de afirmar que no hará «cadenas todas las semanas» si es elegido. «No estoy dispuesto a mentir con el Indec ni con la pobreza, no estoy dispuesto a poner y sacar jueces a mi antojo», señaló.
Más allá de la evidente intención de marcar diferencias respecto del Gobierno, Macri reiteró que no iba a «cambiar lo que se hizo bien».
El acto culminó con la canción de Gilda que el PRO suele usar para esos casos. Fiel a su estilo, el ex presidente de Boca hizo algunos pasos de baile. Pero de inmediato bajó para saludar, sonriente, a sus familiares y colaboradores.
La lider de Progresistas, Margarita Stolbizer, cerró su campaña con una reivindicación de los ideales defendidos por Raúl Alfonsín en 1983, llamó al electorado a votar «por las convicciones» y repudió al radicalismo que aceptó ser parte de un eventual Gabinete del PRO «junto a un carapintada».
En una clara invitación al votante radical a apostar por Progresistas el próximo domingo en las urnas, el acto de Stolbizer, en la sala Pablo Neruda del Paseo La Plaza, arrancó en la oscuridad con la voz en off de Alfonsín cuando recitó el Preámbulo de la Constitución Nacional, pocos días antes de los comicios de 1983 que lo convirtieron en el primer presidente democrático tras el fin de la dictadura.
«En Raúl Alfonsín están nuestras raíces, fue el gran inspirador de 30 años de democracia; es el responsable de las libertadas conquistadas y sigue siendo quien nos emociona», afirmó Stolbizer, la única candidata a presidenta de origen radical, que, de esa forma, insinuó ser la portadora del legado del ex presidente en la compulsa del domingo próximo.
De hecho, se comprometió a «luchar por los principios del Preámbulo» y a «hacer de la política una herramienta para construir igualdad».
Fue allí que aprovechó también para disparar contra el titular de la UCR, Ernesto Sanz, a quien distanció de esa matriz alfonsinista y lo ubicó «sentado en una mesa de Gabinete del PRO junto a un carapintada», en alusión a la posible designación como ministro de Defensa -en un eventual gobierno de Macri- de Juan José Gómez Centurión, quien participó de los levantamientos de Semana Santa, en 1987, y de Monte Caseros, en 1988, contra el gobierno de Alfonsín.
Cuestionó a quienes «votan por alguien que no les gusta para embromar a otro» y a los que «creen que el problema del kirchnerismo se resuelve tapándose la nariz y votando a Macri», o viceversa, votando a Scioli.
Por su parte, el candidato presidencial del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), Nicolás del Caño, sostuvo que su espacio “es la única fuerza que va a defender consecuentemente los derechos de trabajadores, mujeres y jóvenes” y aseguró que “eso lo palpamos con la enorme simpatía que conquistamos en esta campaña, en la que recorrimos todo el país».
En el acto de cierre realizado esta tarde en avenida Corrientes y Montevideo, en el centro porteño, Del Caño llamó a “que acompañen al FIT con su voto los que comparten nuestra estrategia anticapitalista y socialista”.
Acompañado por la candidata a vicepresidenta Myriam Bregman y de los principales candidatos y referentes y la militancia de los tres partidos que componen el Frente (Partido de los Trabajadores Socialistas, Partido Obrero e Izquierda Socialista), Del Caño sostuvo: “Somos la única fuerza que planteó la agenda de las mujeres, de los trabajadores y de la juventud”.
Finalmente, el último en cerrar, el puntano Adolfo Rodríguez Saá, dijo que cualquiera que sea la circunstancia electoral en que lo ponga el electorado, va a pedir el 26 de octubre un “acuerdo por la Argentina” que consta «de tres o cuatro puntos» tales como «erradicar la pobreza, construir un millón de viviendas, defender las economías regionales y la producción».
“El domingo no habrá un ganador definitivo y la Argentina tendrá segunda vuelta electoral”, vaticinó durante el desayuno que ofició de cierre de campaña en el Hotel Hyatt de la ciudad de Mendoza.
«Si esto se cumple y se lo toma como política de Estado es otro país, no importa quién sea el presidente si cumplen con el programa», añadió.
“Voy a proponer un acuerdo y al que lo acepte lo apoyaré, sea Scioli, Massa o Macri, que dijo pobreza cero pero no le creo, porque dijo que iba a hacer 10 kilómetros de subterráneo por año y no lo hizo”, agregó.
Sobre sus propuestas, el ex presidente en 2001 expresó: “Cambiaríamos una Argentina del monólogo por una del diálogo, eso ya es un paso grande, la del desacuerdo y las grietas por una Argentina de acuerdos”.
“El rumbo que tiene que tener la Argentina en estos nuevos tiempos es reparar una inmensa injusticia: la Argentina tiene 12 millones de pobres y para contrarrestar esta situación hay que reactivar todo el aparato productivo del país, las industrias y las economías regionales”.
En ese sentido, Rodríguez Saá señaló: “No pueden los otros candidatos ir con los economistas que tienen, hablan de ajustar, devaluar, endeudar, especular; esa receta ya la hicieron y fracasaron”.