Carlos Pagni, el operador del establishment: propone debatir el rol del voto en blanco para favorecer a Macri

por @gabrieleiriz

Carlos Pagni, se presenta como periodista, quizá alguna vez lo fue, pero lo cierto es que hace ya muchos años que el hombre de calva prominente se dedica a operar políticamente en favor del establishment desde los medios de comunicación. Desde ese lugar persigue un claro objetivo, instalar en la agenda pública los temas que son de interés para los sectores más conservadores del país. Lo hace en su habitual columna, que publica los días lunes el centenario diario La Nación, y recientemente también desde la pantalla de TN, la señal de noticias del Grupo Clarín.

Entre las prácticas reprochables en las que incurrió el «periodista», se encuentra la difusión y revelación de información de carácter privado que obtenía de fuentes espurias y que tal como lo definió la jueza Sandra Arroyo Salgado, que lo procesó por espionaje en 2012, «aquella información vinculada con las decisiones que estaban al exclusivo cargo de los altos estratos del Poder Ejecutivo nacional”. La causa que tramita en el Juzgado Federal 1 de San Isidro tiene como principal imputado al ex SIDE, Bautista «Tata» Yofre y los procesamientos, entre ellos el de Carlos Osvaldo Pagni, fueron confirmados en 2013 por la Sala I de la Cámara Federal de Apelaciones de San Martín en el marco de una causa en la que también se investigan los delitos de asociación ilícita y encubrimiento agravado.

Esta semana, el procesado Carlos Pagni, volvió a cargar las tintas en un tema que, en estos días, le quita el sueño al alcalde porteño, Mauricio Macri; como se van a contabilizar los votos en blanco el 25 de octubre.

Según publicó en un editorial titulado «El voto en blanco podría ser el gran elector», el periodista relata que desde las entrañas de Cambiemos se han planteado ese interrogante y agrega que aunque «la incógnita debería estar saldada, la jurisprudencia ofrece una laguna. O, lo que es más interesante, posiciones encontradas»

De esta manera, Pagni analiza los resultados de las PASO del 9 de agosto y expone un escenario donde el voto en blanco, de ser contabilizado como voto positivoy afirmativo, podría contribuir a meter Mauricio Macri en un ballotage con Daniel Scioli. Algo que sería mucho más improbable si estos no son contabilizados.

Según relata el «pseudo periodista», la cuestión es estratégica. La Constitución establece que para alcanzar la presidencia hay que obtener el 45% de los votos, o más del 40% siempre que se obtenga una ventaja superior a 10 puntos respecto del segundo. Si el universo sobre el cual se realiza el cálculo incluye los votos en blanco, para alcanzar el 40 o el 45% haría falta un mayor caudal electoral. Dicho de otro modo: aumenta la probabilidad del ballottage.

El objetivo de Pagni, es a todas luces, instalar en la sociedad la necesidad de dar el debate sobre como debe interpretarse la Constitución en virtud de esta materia.

Para graficar este escenario, toma los resultados de las PASO del 9 de agosto y formula el siguiente análisis: si se hubiera tenido en cuenta (al voto en blanco), el total de sufragios no habría sido de 21.936.472, sino de 22.926.295. Sobre esta base, Daniel Scioli habría sacado 36,74% de los votos, no 38,41. Cambiemos, de Mauricio Macri, tendría 28,78%; no 30,07. Y la performance de UNA, que postula a Sergio Massa, habría sido de 19,74%; no de 20,63. De modo que Scioli estaría todavía más lejos de superar el 40%.

Este escenario, si bien baja también la perfomance del candidato de Cambiemos en términos cuantitativos. Objetivamente lo beneficia, porque en el promedio, mete al segundo candidato más votado en una segunda vuelta con el primero.

Ese el el objetivo que persigue el hombre procesado por espionaje, instalar a pocos días de las elecciones generales la necesidad de considerar al voto en blanco como un voto positivo y afirmativo aunque este no este sumando efectivamente a ninguna fuerza en particular. Según entiende Pagni en su editorial, votar en blanco, es de un modo u otro, tomar una postura afirmativa frente a la oferta electoral.

Es importante señalar que no hay que entrar en este tipo operetas de carácter golpista y destituyente. Los argentinos tenemos un sistema electoral que conocemos, y las reglas son claras. El 25 de este mes vamos a ir a las urnas a elegir al candidato que sucederá a la presidenta Cristina Fernández, y sea cual sea el resultado, con o sin ballottage, será bajo las reglas establecidas.