La Ley Antidespidos, aprobada el jueves por el Congreso argentino, fue vetada este viernes por Macri. El reglamento establecía la protección de los trabajadores de eventuales despidos durante los próximos 180 días, así como el establecimiento de doble indemnización o la reincorporación de aquellos ciudadanos que fueron removidos de sus cargo sin ninguna explicación.
Entre el sector privado y público se han perdido alrededor de 250 mil puestos de trabajo.
Macri se refirió este viernes a los «inconvenientes» que traería la aplicación de la Ley Antidespidos aprobada por el legislativo argentino con 147 votos a favor, tres en contra y 88 abstenciones.
Durante un discurso ofrecido en la planta de la empresa Cresta Roja, el mandatario vetó la legislación aprobada con el argumento de los supuestos avances alcanzados durante su Gobierno en materia de desempleo y de ataque a la pobreza, sin embargo, los indicadores de gestión de Macri demuestran lo contrario.
Pobreza
El presidente señaló que la Ley Antidespidos «va a traer más pobreza», olvidando que desde su llegada al poder, el 10 de diciembre de 2015, más de 1,4 millones de argentinos ingresaron a la pobreza.
Despidos
El mandatario indicó que cientos de empresas firmaron un pacto para no despedir trabajadores por los próximos 90 días, «muchos dijeron no sé para qué firmamos esto porque pensamos en tomar gente porque vemos a la Argentina con optimismo».
Esta aseveración resulta paradójica, debido a que en los primeros cuatro meses del Gobierno de Macri se han despedido a más de 30 mil empleados públicos.
Generación de empleos
Mauricio Macri volvió a referirse a la “pesada herencia” de los doce años del kirchnerismo y aseguró que en los últimos cinco años del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner no se generó empleo.
La afirmación de Macri contrasta con los datos de la Administración Federal de Impuestos Públicos (Afip), los cuales revelan que el empleo registrado en la era kirchnerista creció todos los años en más de 830 mil personas.
Inflación
Otro de los puntos destacados por el presidente argentino en su discurso es que su Gobierno ha tomado medidas para atender la pobreza y detalló «que más de 1 millón de argentinos cuenta con Asignación Universal por Hijo (AUH), más asignaciones familiares, más para aquellos que tienen empleo temporal, medidas para los jubilados».
Datos recientes señalan que actualmente la inflación en el país ronda el 40 por ciento. La canasta básica proyecta un crecimiento semestral del 30 por ciento mientras que jubilaciones, pensiones y la Asignación Universal por Hijo se actualizaron al 15 por ciento para seis meses y todas las convenciones colectivas conocidas giran en torno a apenas el 30 por ciento anual.
Diálogo
El jefe de Estado dijo que la forma de trabajar de trabajar y avanzar es el diálogo, sin embargo, desde su llegada al poder no se ha reunido con las centrales obreras que han denunciado la ola de despidos impuestas por Mauricio Macri.
Durante su primer mes de mandato Mauricio Macri aprobó una serie de Decretos de Necesidad de Urgencia (DNU) , derogoó la Ley de Medios y disolvió la AFSCA y la Autoridad de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (AFTIC), y los “fusionó” en un único ente que regulará las comunicaciones, llamado Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom).
Mauricio Macri tomo estas medidas y decretos sin haberlas consultadas previamente con los diferentes sectores.
En contexto
El pueblo se encuentra insatisfecho por el aumento salarial firmado por Macri, debido a que el país enfrenta una inflación del 40 por ciento.
En cinco meses de gestión, se sumaron un millón de argentinos a las estadísticas de pobreza, tras el incremento el precio de los servicios básicos de electricidad, gas y combustible.
Las medidas macristas también afectaron la economía doméstica, presentando un achicamiento al Estado para la prestación de servicios en todos los sectores.
Cristina también la hubiera vetado. Infórmense antes de hablar…Inflación y pobreza había desde el año pasado, o en qué país vivían ustedes? (Ah, en el país de Cristina, «Cristilandia» jajaja). Sí hay que parar los despidos, que no son todos los que dicen los medios kirchneristas-cristinistas-camporistas-centrocultural o los carteles en la calle (pagados por estas ratas)…