Pocos días atrás Franco Rinaldi fue el protagonista de un ataque vergonzoso por parte del ahora excandidato a legislador porteño de Milei, Lucas Luna, quién sostuvo que «Nadie, nadie votaría jamás, y lo digo con toda la buena leche del mundo, nadie quiere votar a un discapacitado«. Semejante avanzada contra el hombre que sufre una evidente discapacidad despertó la solidaridad de todo el arco político. Y está muy bien que así sea. Ahora, el problema con Rinaldi no son sus capacidades físicas, sino su evidente falta de capacidad social de empatizar con el otro, sea cual fuere su condición. Un breve repaso sobre las últimas expresiones del dirigente porteño de Juntos por el Cambio revelan una falta de tolerancia, una misoginia, homofobia, racismo y otras tantas características reprochables que hacen de Rinaldi un ser despreciable.

En una de sus habituales transmisiones en vivo por Youtube o Twitch, Rinaldi le apuntó al periodista Mario Massaccesi por su presunta homosexualidad, Hace 20 años que te hierve la cola», se mofaba Rinaldi sobre la orientación del conductor de TN, quién nunca se refirió a su vida íntima.

La defensa de Rinaldi sobre estas afirmaciones fueron ridículas. “Yo no me burlé de Mario Massaccesi, estaba haciendo un stand up».

Lamentablemente, las transmisiones por Twitch de Rinaldi no quedan grabadas como para traficar algunos de. sus innumerables exabruptos. Pero se pueden detallar por escrito. En una oportunidad se refirió al «verso de los 30 mil desaparecidos», también se preguntó «Si todo crimen contra una mujer es un feticidio, ¿como se llama el crimen contra el hombre?. También denunció que el gobierno estaba robando con el dinero de «los alimentos para los negros» y remató con la frase «Black lies matter», la mentira de que la vida de los negros importa, evocando al movimiento «Black Lives Matter». Pero Franquito no se queda conforme y sostiene, contra el movimiento feminista, que «impera el atropello de la ginecocracia». Rinaldi va contra todo y contra todos los que no se enmarcan en lo que él entiende como «normalidad». Lo que se dice un verdadero facho.

Ahora, toda esta cantinela no solo pinta de cuerpo entero a Rinaldi, también se ha configurado como un verdaero exponente de lo que la derecha califica como «casta». Recientemente se supo que ademas de facho, homofóbico, racista y misógino, es ñoqui.

En la Auditoría General de la Nación son varios los que se preguntan por Franco Rinaldi. Es que el candidato a primer legislador por la lista de Jorge Macri en CABA en lo que va del año aún no pisó las oficinas del organismo. Con 9 años de antigüedad en la AGN y un sueldo de bolsillo que supera los 400 mil pesos, Rinaldi no cumple con el trabajo presencial en la auditoría y se ha consolidado como un verdadero “ñoqui”.

Los empleados que están en el día a día de la AGN no están sorprendidos por la ausencia de Rinaldi, a quien nunca lo vieron con frecuencia. Por las dudas, aclaran que ya en marzo de 2022 se dejó atrás la emergencia por COVID y se estableció la obligatoriedad de trabajo presencial para todos los empleados del organismo independientemente de su categoría y función.

En la disposición N°45/2022 con fecha del 16 de marzo, la AGN ratificó los alcances del Decreto de Necesidad y Urgencia N°678/2021 que había confirmado “la prestación de servicios presencial para las y los agentes de todas las jurisdicciones, organismos y entidades de la Administración Pública Nacional”.

Franco Victoria Rinaldi Torres, tal su nombre completo, ingresó a la AGN primero como contratado y luego pasó a planta permanente, designado allá por 2014 por el radical y entonces titular del organismo Leandro Despouy.

Politólogo de formación, Rinaldi figura en el recibo de sueldo en la categoría D2 que comprende “al personal designado para ejecutar funciones profesionales, o funciones o servicios técnicos o especializados que requieren conocimientos, habilidades o pericias determinadas para la aplicación de normas, procedimientos, métodos o rutinas específicas a una diversidad de tareas bajo dirección de personal de mayor nivel”.

En 2014 lo empleados de la AGN ya habían denunciado que Rinaldi era un “ñoqui” del organismo. Pero no solo eso, sino que lo acusaron de utilizar el acceso a la información de la AGN con fines políticos, reflejó C5N en un articulo.

Antes de que Mauricio Macri llegara a la Presidencia, Rinaldi publicó un libro en contra de la gestión de Mariano Recalde en Aerolíneas Argentinas, empresa del Estado que desde la AGN debería controlar de manera imparcial

En ese libro, Rinaldi publicó material de “primera mano” sobre Aerolíneas sin aclarar en ningún momento que trabaja en el organismo dedicado a controlarla, lo que viola varios incisos del artículo 2 de la Ley de Ética Pública.

En ese sentido, el inciso “F” del citado artículo lo conmina a “abstenerse de utilizar información adquirida en el cumplimiento de sus funciones para realizar actividades no relacionadas con sus tareas oficiales o de permitir su uso en beneficio de intereses privados”.

Convertido en un verdadero influencer liberal, Rinaldi utiliza sus redes sociales para exponer un discurso machista y negacionista del terrorismo de Estado que vivió la Argentina. Por caso, asegura que los 30 mil desaparecidos son “un verso” y reflexiona “cómo se llama el crimen contra el hombre”, para desacreditar la figura jurídica del femicidio.

Rinaldi tuvo su primera incursión política en las elecciones legislativas del 2021, cuando fue candidato a diputado nacional dentro del espacio de Republicanos Unidos, creado por Ricardo López Murphy pero ya disuelto, participando de la interna de Juntos por el Cambio en la ciudad de Buenos Aires

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