Este lunes feriado hubo varios idas y vueltas respecto la reunión que habían pactado ayer domingo el primer mandatario en ejercicio, Alberto Fernández y el presidente electo y panelista de TV, Javier Milei tras imponerse en la segunda vuelta electoral.
«Al menos hoy no se hace», fue la respuesta de una voz con acceso al despacho presidencial, a pesar de que desde la noche del domingo, cuando Alberto F. y Milei hablaron por teléfono, había quedado claro que la idea era que fuera antes de este martes, para anticiparse a la apertura de los mercados. «No se postergó porque nunca se llegó a confirmar el horario», reforzarían luego en el Gobierno.
¿El motivo? «No hubo acuerdo», indicaron desde Balcarce 50 fuentes al tanto de las negociaciones que llevaron adelante el propio jefe de Estado con dos interlocutores de Milei: el jefe de Gabinete del libertario, Nicolás Posse; y quien será el ministro del Interior, Guillermo Francos.
Las principales diferencias tuvieron que ver con tres aspectos: si se hace foto ó no de la reunión, el lugar y los participantes. «Está todo embarrado, ya para hoy no se llega», concluían las voces minutos antes del mediodía. Fernández ofreció que fuera mano a mano, en la Quinta de Olivos, pero la contraoferta fue que se hiciera «algo más institucional» en Casa Rosada y amplio, con asesores de ambos lados.
Además de lo logístico, surgió una discusión posterior, todavía incipiente, que tiene que ver con la pretensión del líder libertario de que el oficialismo aporte votos para la aprobación del Presupuesto 2024, algo que asoma complejo si es que el proyecto que proponga tratar en el Congreso incluya un ajuste del gasto público del 15% como pretenden en La Libertad Avanza. «Pero ese es un debate posterior», se atajaron las fuentes al tanto de las conversaciones.
