La Argentina puede irse al tacho en 5 minutos, si se puede. Eso es lo que sucedió tras las PASO de este domingo donde el ministro de Economía Sergio Massa sufrió un revés por la falta de acompañamiento del electorado. Así, el lunes post elección llegó la devaluación (22%) y el dólar Blue inició una escalada que nadie se atreve a pronosticar cuando ni donde terminará. Este miércoles llegó a la cifra récord de 780 pesos.
Con este escenario alocado, los comercios que se dedican a la venta de electrodomésticos y artículos del hogar sufrieron faltantes de precios, suspensión de ventas o importantes aumentos en los distintos productos.
El presidente de la Federación Argentina del Comercio en Artefactos para el Hogar y Afines (FACA Hogar) y presidente de la Cámara de Artefactos del Hogar de Santa Fe, José Lilino, contó a C5N que el lunes hubo mucha incertidumbre en el sector porque un gran porcentaje de los productos que comercializan tienen insumos importados.
Ante el aumento del dólar, el empresario indicó que algunas empresas proveedoras suspendieron la venta de productos y otras mandaron listas con aumentos que van desde el 10% hasta un 50% según los diferentes productos. Además, advirtió que los precios pueden seguir aumentando en los próximos días.
«No tenemos precios, las empresas suspendieron ventas porque no sabían cómo iba a impactar todos los aumentos en el costo final. A partir de hoy empezamos a tener alguna liberación de compras más que nada en lo que se refiere a productos que tienen un gran contenido de la nacional en su fabricación», advirtió el titular de FACA Hogar.
En ese sentido, Lilino detalló que muebles, colchones, cocinas y artefactos de similar tenor tuvieron aumentos que oscilan entre el 12% en muebles y 22% en las últimas 48 horas mientras que en artículos de tecnología (televisores, celulares, computadores y consolas) aún no tienen lista de precios.
Este miércoles, un Smart TV LED de 40 pulgadas estaba a un precio promedio de $150 mil, una heladera básica de 290 lt $280 mil, una cocina de gas natural $140 mil, y un aire acondicionado de 3450W $350 mil. Una mesa de comedor de madera de 150×90 cm $76 mil, un set de 6 sillas nórdicas con almohadón $140 y un colchón King 140×190 cm $215 mil.
En ese panorama, Lilino contó que muchos comerciantes deciden perder rentabilidad para no trasladar los aumentos a los clientes y de esa manera mantener el consumo. «Hace tiempo las pymes venimos trabajando por debajo en relación a la facturación del año pasado», apuntó.
En esa línea, el referente de los comerciantes comentó que, producto de la inestabilidad y la incertidumbre, cada vez hay menos promociones en los bancos para fomentar el consumo y reclamó la necesidad de que el gobierno implemente nuevos instrumentos de venta para beneficiar al consumidor además de medidas para mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores.
«Nosotros somos del partido de los laburantes, nos importa que quienes nos conducen les vaya bien porque nos va bien a todos. Por eso necesitamos que haya estabilidad y que piensen en el consumidor. A nosotros nos interesa que los consumidores sean bien resarcidos porque eso se derrama. Si al consumidor no le alcanza para la cuota de las mesas y las sillas, los microondas, nosotros estamos muertos», completó.
Fecoba advirtió sobre la falta de stock y fuertes aumentos de precios en insumos
En línea con lo que registró la FACA Hogar, la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (FECOBA) publicó un comunicado con datos relevados por el Centro de Investigación Pyme donde apuntan que tras las PASO y la devaluación del dólar, el 74,6% de los comerciantes porteños sufrió un aumento de entre el 10 y el 25% en los precios de lista de sus insumos con la devaluación mientras que el 13,4% llegó a percibir incrementos de hasta el 50% y un 4,5% de hasta el 75%.
Según el resultado de la encuesta, durante agosto –previo a las elecciones-, el 53,7% de los comerciantes ya había enfrentado un aumento de precios en las listas de bienes y servicios de entre el 10% y el 50%, y el 46,3% de hasta el 10%. En todos los casos teniendo en cuenta el costo de los impuestos para la importación.