El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja, destacó la reactivación de la industria en el último año y medio, y, al mismo tiempo, subrayó la necesidad de políticas que permitan transformarla en un «crecimiento a largo plazo».
El dirigente industrial afirmó en diálogo con Télam que se requiere de «estabilidad macroeconómica y políticas de Estado orientadas hacia la producción y el crecimiento concertadas entre el oficialismo y la oposición».
«Hay una reactivación, pero hay que transformarla en un crecimiento a largo plazo», sostuvo el dirigente industrial.
Según Funes de Rioja, «desde el 2011 el empleo privado no crece con el vigor esperable» ya que, «de acuerdo al crecimiento vegetativo, debería haber un crecimiento de 250.000 a 300.000 empleos anuales».
En ese sentido, el presidente de la UIA pidió el establecimiento de «políticas de creación de empresas y de empleo» y un «modelo de formación profesional dual que combine el aprendizaje y la formación».
Del mismo modo, el dirigente industrial señaló que «hay que hacer que las pymes dejen de tener miedo a contratar».
«Para eso hay que dejar el régimen de multas laborales que son casusa de litigiosidad y aplicar beneficios remunerativos como la eximición de cargas sociales o la aplicación a la carga del IVA de los aportes patronales», propuso el dirigente gremial empresario.
Respecto al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), Funes de Rioja afirmó que el mismo es una «condición necesaria pero no suficiente» para el desarrollo de la industria.
«Hay que resolver el problema de la deuda y hay que hacerlo de la forma más dinámica posible, sino no hay acceso al financiamiento y a la tecnología», agregó el titular de la UIA.
En la misma línea, el director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), Hernán Letcher, afirmó que, en ausencia de un acuerdo, el default «no era un escenario en el que se podía imaginar un boom del empleo», y que el mismo tiempo, al generar una probabilidad de devaluación, hubiese implicado una «erosión del salario».
En ese sentido, el acuerdo con el FMI es un factor más que jugará en las expectativas de la industria, las cuales, a su vez, pesan a la hora de decidir contratar personal.
El Centro de Estudios UIA (CEU) relevó que un 14,5% de empresas industriales prevé aumentar su personal, mientras que 21,9% espera aumentar las horas trabajadas por el personal afectado al proceso productivo.
En tanto, el 33,7% de los encuestados por el Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI) en las diversas ramas industriales en noviembre último esperaba un aumento de la demanda interna.