El presidente de la Coalición Cívica-ARI bonaerense, Andrés De Leo, afirmó este lunes que el ex mandatario Mauricio Macri «no es el líder ni el referente de Juntos por el Cambio», y advirtió que el espacio debe «tener una mirada hacia adelante» sin «repetir errores políticos, sobre todo de gestión económica». .
«El ex presidente Macri tiene un espacio, pero claramente no es el líder ni el referente de Juntos por el Cambio», resaltó De Leo en declaraciones a NA, y aclaró que «ningún dirigente representa la totalidad del espacio».
Por otro lado, la conducción nacional de Juntos por el Cambio resolvió postergar la habitual reunión por videoconferencia de los lunes, a fin de pasar a partir de ahora a encuentros cada 14 días, en lugar de semanales.
Si bien no se informaron los motivos sobre el cambio de frecuencia de estos encuentros, lo cierto es que esta modificación evitó realizar la reunión luego de que surgieran nuevas tensiones dentro de loa coalición opositora tras la reaparición pública de Mauricio Macri.
En Juntos por el Cambio hizo ruido especialmente una de las declaraciones del ex mandatario, quien sostuvo que se arrepentía de haber delegado durante su gestión la negociación con el peronismo a Rogelio Frigerio y Emilio Monzó, dos dirigentes del «ala moderada» de ese frente.
En ese marco, el presidente de la Coalición Cívica bonaerense precisó: «Nadie puede negar la importancia de un ex presidente, pero Juntos por el Cambio necesita tener liderazgos no tan excluyentes. La ciudadanía que nos ha votado no eligió un líder».
Al ser consultado sobre las expectativas que tiene de cara a las elecciones legislativas de 2021, respondió: «Si el Gobierno nacional y el provincial no hacen un cambio del rumbo importante, sobre todo en materia económica, tengo la sensación de que van a tener una elección muy difícil. La sociedad los va a castigar».
Durante una entrevista con Noticias Argentinas, De Leo afirmó que la Argentina está «frente a una situación de extrema crisis», y detalló: «Hay que ser conscientes de que acelerar o precipitar una crisis puede llevar a una frustración de la ciudadanía. Tenemos una crisis política, económica y sanitaria». (NA)