El presidente Mauricio Macri volverá a representar al país en una cumbre internacional que al concluir, el presidente será Alberto Fernández. Se trata de la cumbre del clima de Naciones Unidas, conocida como COP25, que se celebrará en Madrid (España) entre el 1 y el 13 de diciembre.
El mandatario argentino -saliente- estará en la apertura, el 2 de diciembre, y se quedará un día más para participar de los foros y mantener reuniones bilaterales con líderes internacionales, que estarán entre los 25.000 asistentes que se espera en ese evento de gran envergadura. Lo curioso es que cualquier acuerdo que pudiera cerrar Macri quedaría sujeto a la aprobación de las nuevas autoridades.
Macri tiene previsto volar a Madrid el 1 de diciembre, para participar del convite que tendrá como sede IFEMA, la Feria de Madrid.
En un principio, Santiago, Chile, era el lugar donde iba a tener lugar la cumbre, pero las protestas que se suceden en el país trasandino hicieron que días atrás el presidente Sebastián Piñera renunciara a esa condición y postulara en su lugar a Madrid.
La oferta fue aceptada por Naciones Unidas, pero de todos modos Chile mantendrá la presidencia del encuentro, lo que supone coordinar las negociaciones de los delegados de los casi 200 países que asistirán, mientras que la agenda trazada originalmente para Santiago seguirá en pie.
Macri viajará acompañado por el canciller Jorge Faurie; el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, y el secretario de Gobierno de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman, aunque podría sumarse algún otro funcionario a la comitiva, adelantaron fuentes oficiales.
El 4 de diciembre Macri ya estará de retorno en Buenos Aires, pero por poco tiempo, porque ese mismo día, o al día siguiente, viajará a la localidad de Bento Gonçalves, en Brasil, donde entre el 4 y 5 de diciembre se realizará una nueva Cumbre del Mercosur, escenario en el que Brasil traspasará la presidencia pro témpore del bloque a manos de Paraguay.
Bento Gonçalves es un municipio brasileño del Estado de Río Grande del Sur, en medio de la Sierra Gaucha y a 125 kilómetros de Porto Alegre.
Ese lugar servirá para que Macri se despida de los mandatarios del bloque, empezando por el brasileño, Jair Bolsonaro, que ya tuvo cuestionamientos hacia el presidente electo y recibió a su vez críticas por haber adelantado la fecha de la cumbre, que de este modo se celebrará durante la gestión del saliente jefe de Estado y no de su sucesor.
