El Gobierno les ordenó a las distribuidoras de gas posponer para después de las elecciones el cobro del monto correspondiente al 50 por ciento de las facturas emitidas entre el 25 de agosto y el 31 de octubre, según consignó en su edición de hoy el diario Página12.
Esas boletas incluyen los consumos del bimestre julio-agosto, período en el que se concentra la mayor demanda anual de gas. La medida beneficia a los clientes residenciales y el único objetivo es evitar que lleguen facturas con fuertes subas en la recta final de la campaña electoral. Una vez que pasen las elecciones del 22 de octubre, los usuarios deberán afrontar el 50 por ciento que les quedó pendiente junto con el monto del próximo período, pero para entonces ya habrán votado.
El costo financiero que suponga para las distribuidoras postergar pagos a transportistas y productoras de gas, a raíz de los menores ingresos que perciban, será afrontado por el Estado Nacional.
La novedad trascendió ayer luego de que el ministro de Energía, Juan José Aranguren, le enviara una carta al directorio del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) donde le solicita al organismo que adopte las medidas necesarias para que las distribuidoras difieran el cobro del 50 por ciento de las boletas correspondientes al período julio-agosto y lo incluyan, sin intereses, en la primera factura emitida con posterioridad al 31 de octubre.
Si a un hogar le tocaba pagar 1000 pesos por el consumo bimestral de gas de julio y agosto, entre fines de septiembre y octubre le va a llegar una factura de 500 pesos, que podrá pagar en dos cuotas de 250 pesos mensuales, y entre fines de octubre y noviembre le llegará otra factura de 500 pesos que también podrá pagar en dos cuotas de 250 pesos. El problema es que los 500 pesos que le lleguen a ese usuario residencial después de las elecciones legislativas se sumarán al gasto correspondiente a su próxima factura.
La nota de Aranguren al Enargas aclara además que “de verificarse una afectación financiera por la aplicación del diferimiento arriba mencionado en los ingresos propios de las licenciatarias de los servicios de distribución y por el potencial diferimiento en los pagos de dichas distribuidoras a los productores de gas y/o a las licenciatarias de transporte, tal afectación será oportunamente evaluada y asumida por el Estado Nacional, a cuyos efectos se realizarán las gestiones presupuestarias”. Ese punto será negociado con las empresas en las próximas semanas.