Desde el día uno Mauricio Macri puso la economía de todo el país en función de los reclamos de los terratenientes y agroexportadores. Tal es así que no vaciló en tomar las medidas más críticas sin siquiera pestañear, eliminó la mayoría de las retenciones a las exportaciones agrarias y devaluó el peso, causando de la noche a la mañana una de las peores remarcaciones de precios en los alimentos de los que se tenga memoria y con esa decisión llegó el hambre a millones de familias.
Sin embargo el campo no se conformó. La soja solo redujo un 5% del impuesto y continuaron los reclamos. Por eso, envalentonado con los resultados en las PASO del domingo pasado, el gobierno no pierde un minuto y ya salió a anunciar que para el final de este mandato reducirá aún más lo que pagan los magnates agroexportadores por colocar sus granos en el mercado internacional.
Desde enero del año que viene a comenzarán reducir las retenciones a la soja, que actualmente están en el 30 por ciento, hasta dejarlas al final de su mandato en el 18 por ciento, ratificó hoy el ministro de Agroindustria y cultivador de la oleaginosa, Ricardo Buryaile.
Al hablar en el marco del Precoloquio del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA) que se lleva a cabo en esta ciudad, Buryaile sostuvo que «vamos a ir bajándolas a razón de 0,5 por ciento por mes y 5 por ciento cada seis meses» hasta que termine «el primer mandato» del presidente Mauricio Macri.
El funcionario, quien además anticipó que el gobierno trabaja en la creación de un seguro de cobertura contra el clima, dijo que al concluir el actual período de gobierno «las retenciones a la soja van a quedar en el 18 por ciento».
«Las retenciones no me gustan porque es un impuesto que penaliza la distancia», explicó el funcionario al explicar el efecto de reducción de rentabilidad que provoca el gravamen entre los productores mas alejados de los puertos.
«Me debo haber equivocado», admitió Buryaile con ironía luego de decir que la medida -que ya está plasmada en un decreto- va a regir durante un supuesto «primer mandato» de Macri, en la hipótesis de que el presidente aspire a una reelección.
Por otro lado, el ministro anticipó que el gobierno trabaja en la creación de un seguro de cobertura para desastres climáticos, cuya prueba piloto se va a estar poniendo en marcha en los próximos días para el maíz.
Al fin una buena medida, no sería muy lindo que te saquen del sueldo o de tu trabajo como monotributista o pequeño empresario el 30 por ciento de todo lo que producís o facturas para mal alimentar vagos. Esta retención hace inviable la producción de soja en los lugares mas alejados de los puertos, si no fijate como va bajando la intención de siembra año a año.