MACRI-PROCER
El presidente vuelve a tropezar con la misma piedra que el 9 de Julio pasado durante los festejos por el bicentenario de la independencia.

Por Gabriel Eiriz – @gabrieleiriz

El presidente tiene la costumbre de repetirse a si mismo. En realidad no suele decir nunca nada nuevo, viene manejando 4 o 5 conceptos desde que inició en la vida política y de ahí no se mueve. No se trata de coherencia, sino de desconocimiento. Mauricio Macri conoce poco a su país y sabe nada de historia. Por esto, cada vez que habla de nuestros héroes, no los cita, ni refiere a datos históricos concretos. Lo que hace el presidente es imaginarse en esa situación y reaccionar según su visión de la Patria, que no podría estar más alejada de los ideales de los próceres que forjaron la Nación.

Del mismo modo que el pasado 9 de Julio, con la visita del ex Rey de España, cuando expresó que «los patriotas debían haber sentido una gran angustia por tener que separarse de España». Macri reescribe la historia argentina con una versión lastimosa y desacertada en términos históricos.

Esta vez, en el marco de la celebración por el  25 de Mayo, Macri encarnó el pensamiento de grandes patriotas (algo que él no parece ser) y sostuvo que los hombres y las mujeres que llevaron adelante la gesta de Mayo «vencieron los miedos y decidieron que querían ser libres» y resaltó que «no querían que alguien, allá a la distancia, se sintiese dueño de lo que ellos tenían que hacer en su vida diaria»,  pero el presidente no hablaba en realidad de los gestores de la revolución, hablaba de lo que le piensa él mismo, por eso se lanzó y dijo que «un poco más de 200 años después, se nos repite la historia» y afirmó que hoy «tampoco desde la política o desde la dirigencia, porque también puede pasar entre los empresarios, los sindicalistas y los jueces», nadie puede creerse «dueño de decirnos lo que tenemos que hacer».

Mauricio Macri
El presidente Mauricio Macri durante el Locro Patrio en el museo del Bicentenario

El verdadero mensaje de Macri vino en segunda instancia, advirtió a «empresarios, sindicalistas y jueces» que no pueden creerse «dueños de decirnos lo que tenemos que hacer».

El mensaje presidencial tuvo lugar al encabezar un «locro patrio» en el Museo del Bicentenario en la Casa Rosada para celebrar el 25 de Mayo, donde pretendió hacerse dueño de la gesta patriótica y trazó un paralelismo entre lo que fue la lucha por la independencia como colonia del imperio español, con el «cambio» que propone desde su espacio político.

«Hoy los argentinos decidimos un cambio que tiene que ver con querer ejercer nuestra libertad, la de elegir dónde trabajar y cómo vivir y desarrollarnos», indicó y ratificó que «los ciudadanos somos los que tenemos el poder y elegimos servidores públicos, como el que les habla, para que nos ayuden a trabajar y a desarrollar y a superar las dificultades», señaló con un evidente trastorno mesiánico.

En ocasión del 207º aniversario de la Revolución de Mayo, Macri insistió en su apertura al mundo que tanto le está costando a la industria nacional, las pymes y a los trabajadores argentinos que luchan por colocar algo de lo que todavía se produce en el país, contra los bienes de consumo importados de Asia a precios imposibles de competir con los costos de producción locales.

«Cuando decimos que queremos ser libres para progresar no elegimos aislarnos del mundo, porque queremos ser parte del mundo», sostuvo.

«Hoy en el día de la Patria les digo que vamos por el camino correcto, pero lo tenemos que hacer juntos. Esta no es una tarea de un Presidente, de un Gobierno o de unos pocos», concluyó el presidente que más endeudó a la Argentina en un breve lapso de tiempo.

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