La premiación tuvo lugar en Washington, Estados Unidos, y se fundó en la firme decisión de Magnetto “de resistir y mantener la independencia editorial, frente al intento oficial de avanzar contra las voces críticas”, al tiempo que resaltó “su compromiso con el rol de la libertad de expresión y del periodismo profesional”.

Con una gala en el Newsmuseum de la capital estadounidense, Magnetto recibió la distinción por “el ejercicio y la defensa de la libertad de prensa en la Argentina durante la última década” frente al presidente de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa), Guillermo Ignacio; el presidente de la Comisión de Libertad de Prensa de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), Claudio Paolillo; el presidente de la Asociación Internacional de Radiodifusión (AIR), José Luis Saca; el ex presidente de esa misma asociación, Luis Pardo; el jurista venezolano Asdrúbal Aguiar y el ex presidente uruguayo José María Sanguinetti.


“Le dan el premio a un Grupo que le dió voz únicamente a los dueños del poder” pablo llonto


“Freedom House es una de las tantas ONG’s financiadas por el Departamento de Estado norteamericano y además recibe dinero de muchísimas fundaciones y empresas privadas”, indicó a Contexto Ari Lijalad, periodista y politólogo, autor de varias investigaciones sobre el accionar de este tipo de entidades.

Organizaciones como esta, que premian el accionar de empresarios mediáticos “se presentan como fundaciones independientes, pero son totalmente dependientes de la política exterior estadounidense”, agregó Lijalad.

El propio Paul Singer (titular de fondos buitres litigantes contra Argentina) ha puesto plata a través de una fundación” en esta ONG, denunció Lijalad, una movida que refleja las maniobras de influencia en el exterior del gobierno norteamericano. Prácticas comunes que conforman una tríada junto a las intervenciones militares y los organismos como la ONU, con las que avanza sobre los intereses locales de algunos países de forma subrepticia.

En este sentido, Freedom House, que ha financiado sitios como Chequeado.com y Argentina Debate, “le dan a Héctor Magnetto un reconocimiento al valor que tuvo uno de los suyos para defender los intereses estadounidenses, ya que todo el trabajo del Grupo Clarín fue para que gane Mauricio Macri en función de estos últimos”, explicó el periodista.

Por su parte, Pablo Llonto, ex periodista de Clarín y abogado en derechos humanos, opinó que el galardón que recibió Magnetto “es un premio a uno de los mayores censores de la Argentina, reconocen a quien censuró a mucha gente para proteger a militares y empresarios durante la dictadura cívico militar”.

“Le dan el premio a un Grupo que le dió voz únicamente a los dueños del poder”, agregó Llonto. “Se premian entre ellos, entre el establishment de los medios de comunicación”, agregó y aclaró que eso para el periodista trabajador “es algo que no tiene ningún valor”.

Carolina Muzi, docente de la Universidad Nacional de Avellaneda y periodista por casi 16 años en el diario porteño, dijo que el reconocimiento al CEO del Grupo Clarín “forma parte de esta novela bananera que el diario lleva adelante desde hace décadas en la sociedad argentina, al igual que otros medios latinoamericanos dentro de la SIP”.

“Hay que poner en duda este premio y mirar las redes y los contextos en que se da, por ejemplo observando el origen del presidente de Freedom House, Mark P. Lagon, un hombre cuya trayectoria ha siempre ido de la mano de las políticas exteriores de Estados Unidos”, señaló Muzi.

Asimismo, “Clarín no es un medio independiente, es un partido político” y un premio de este tipo visibiliza los verdaderos intereses que desde Washington tienen en el país, reflejados en la presidencia de Macri y en la defensa acérrima que hacen de su gobierno. “Es ridículo y una fantochada, una trucheada que conforman una escenografía”, concluyó Muzi.

print