Los trabajadores del Hospital Posadas denunciaron que el gobierno de Mauricio Macri envió 600 telegramas de despidos a empleados del nosocomio. «La campaña de desprestigio contra el hospital que se inició de parte del macrismo tenía un único propósito: despedir trabajadores para luego privatizarlo», afirman desde la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
El gremio ratificó en asamblea la adhesión al paro nacional del miércoles y el estado de alerta. Del encuentro, junto al Secretario General de ATE Morón, Darío Silva, participó también la Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora Nora Cortiñas.
«Los trabajadores autoconvocados venimos advirtiendo la perversa maniobra de la conducción del hospital, que se inició con la burda denuncia de un sabotaje y siguió con las acusaciones de vagos, militantes y ñoquis», acusan desde el sector de trabajadores autoconvocados. Mientras que las autoridades del hospital sostienen que hay irregularidades en las contrataciones de los empleados. «Más de 300 trabajadores no tienen secundario terminado y ese es un requisito básico», explican fuentes de la actual conducción del hospital ubicado en el partido bonaerense de Morón.
En febrero, el Gobierno Nacional radicó una denuncia ante la justicia federal de Morón para que se investigue el daño provocado al resonador magnético del Hospital Posadas que utilizan diariamente entre 30 y 40 pacientes, como parte de una serie de irregularidades detectadas en ese centro de salud bonaerense. El jefe de Residentes de Neurocirugía, Juan Manuel Herrero, desmintió que fue un sabotaje y explicó que «uno de los residentes ingresó a la sala con una silla de ruedas y lo que ocurrió fue un accidente».