Así tituló un articulo la prestigiosa agencia de noticias norteamericana: «Wall Street está al mando de la Argentina (nuevamente)»
«Desde su triunfo en noviembre, el presidente Mauricio Macri, un ex empresario, ha llenado el Estado con empresarios, financistas, economistas y ejecutivos».
Según afirma la agencia de noticias estadounidense la principal debilidad del camino de Mauricio Macri reside en que su equipo de economistas «preparado por Wall Street» es «demasiado cercano» a los fondos buitre.
Sobre la conformación del Gabinete, la nota expresa que «no es un plan que un líder consideraría implementar hoy en día, ni en Estados Unidos, España, o Grecia, lugares donde el sentimiento anti-banquero ha ido aumentado en los últimos años» y asegura que Macri quiere deshacer las políticas kirchneristas de fuerte intervención económica cuanto antes y «quiere profesionales especializados en las leyes del libre mercado que se hagan cargo».
El texto asevera que «no son sólo los alumnos de JP Morgan Chase y Deutsche Bank (en clara alusión al ministro Alfonso Prat-Gay y Luis Caputo) que dominan los puestos gubernamentales. Goldman Sachs Group Inc., Barclays Inc. y Morgan Stanley están representados también, con ex-integrantes en puestos claves en el Bancos Central y la agencia estatal de fondos de pensiones».
Por otro lado, la agencia deja entrever una crítica al acuerdo con los fondos buitre: «Los términos del acuerdo, que aún necesita de la aprobación del Congreso, han sido fuertemente criticados por los aliados del kirchnerismo como demasiado favorables para los acreedores internacionales, muchos de los cuales están posicionados para llevarse importantes ganancias de los bonos defaulteados.
Y allí se halla la principal vulnerabilidad en el camino elegido por Macri: la percepción de que este equipo formado en Wall Street es «demasiado cercano» o «está demasiado cómodo» con estos fondos.
«Esta deberá ser una preocupación para más adelante, si es que Macri falla en su plan de estabilizar la economía. Por ahora, a los argentinos se los ve más preocupados por normalizar el país. En el último conteo, la inflación anual estaba en un 30%. Arreglá eso y a la gente probablemente no le importe cuánta plata se le paga a los extranjeros», finaliza.