En 45 días de gobierno, Mauricio Macri hizo todos los deberes que pretendía el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto: dio de baja por decreto a la Ley de Medios, le devolvió el negocio del fútbol por TV y eliminó la competencia de TyC Sports, el canal estatal DeporTV.
Para coronar esa entrega, hoy Magnetto estuvo en la Casa Rosada, donde se habría reunido con el presidente. Para colmo, el mismo día en que se negó a recibir a Estela de Carlotto y a representantes de organismos de Derechos Humanos.
Sin licitación, Macri le entregó la crema del negocio de la televisación del fútbol a Canal 13 y Telefé, que transmitirán a River, Boca, Racing e Independiente, a cambio de una cifra módica. América TV presentará un amparo, y la TV pública ya no pasará a los equipos grandes.
En la misma línea, decidió cerrar el canal deportivo DeporTV, que dependía del Estado, para que ya no fuera competencia de TyC Sports, propiedad del multimedio de Héctor Magnetto.
Además puso a los abogados Mariano Federici y María Eugenia Talerico como presidente y vicepresidente, respectivamente, de la Unidad de Información Financiera (UIF), el organismo encargado de investigar el lavado de dinero.
Ambos pertenecieron al estudio del abogado Juan Félix Marteau, que tiene como clientes al JP Morgan y a Clarín en las respectivas causas por lavado de dinero que se siguen contra esas empresas.
Hoy, para sorpresa de nadie, Macri se reunió en Casa de Gobierno con Héctor Magnetto y toda la cúpula de la Asociación Empresaria Argentina, incluido Paolo Rocca, de Techint.