Un «llamativo» error del periodista Nicolás Wiñazky, confundió esos plazos fijos en dólares, los que calificó de «fantasmas» cuando en realidad fueron pesificados por la mandataria hace más de 3 años.
Según el ladero de Jorge Lanata, el día que murió, 27 de octubre del 2010, Néstor Kirchner tenía un patrimonio de más de 60 millones y medio de pesos. Era una fortuna constituida por varias empresas, inmuebles, y sobre todo por diecinueve plazos fijo depositados en el Banco de Santa Cruz. La suma del total de estos últimos fondos era de $33.791.077,67. La información surge de la documentación que, en el 2014, el propio contador del ex presidente presentó en el juzgado en el que se tramita su sucesión, el legado material que le dejó a su esposa e hijos.
En ese mismo año, el 2014, la Presidenta declaró ante la Oficina Anticorrupción (OA), y ante la AFIP, solo nueve de los plazos fijo como “herencia”, sin especificar qué porcentaje había recibido de cada uno de ellos.
Matemáticas son matemáticas: hay al menos 10 plazos fijo “fantasmas” de Néstor, entonces, que la Presidenta no registró ante el Estado.
Ante esta publicación, Manzanares, contador y asesor contable e impositivo de la Presidenta y de sus hijos, calificó como «falsedades» lo publicado por el matutino, que «afectan la honorabilidad y honestidad» de la familia Kirchner.
En esa línea, el profesional aclaró que el detalle de los bienes de la Sucesión de Néstor Carlos Kirchner fue confeccionada por él en carácter de declaración jurada el 3 de septiembre de 2014 para ser incorporada en el expediente que tramita dicha sucesión.
En ese sentido, indicó que «se corresponde a los bienes existentes al momento del fallecimiento de Néstor Kirchner, es decir que se refiere a bienes existentes en el año 2010, y no en el año 2014».
«Los plazos fijos denominados fantasmas por la nota fueron traspasados al Banco Nación y se corresponde a la declaración jurada en AFIP, DGI Y Oficina Anticorrupción»
Por eso, sostuvo Manzanares, «la fecha de mi certificación no puede confundirse con la fecha a la cual corresponde la existencia de bienes».
«Tomar una extracción del expediente y publicarla sin hacer mención a la fecha de posicionamiento de los bienes, que como las normas legales indican es la fecha del fallecimiento del causante de la sucesión, no puede tener otra lectura que la de aplicar la confusión para justificar un título periodístico de tanta trascendencia como lo sería la existencia de ocultamiento de bienes», reafirmó el contador saliendo al cruce de Clarín.
Asimismo, agregó que «si se corroboraran las DDJJ presentadas por Cristina Fernández de Kirchner, por el año 2010, tanto ante AFIP DGI, como ante la Oficina Anticorrupción, se podría verificar que dichos certificados de plazos fijos, tanto en pesos, como en dólares, están incluidos y con la misma numeración. Imposible sería que cuatro años después los plazos fijos mantuvieran idéntica numeración».
Enseguida, Manzanares expuso: «La declaración jurada presentada por la Dra. Cristina Fernández de Kirchner, tanto ante la AFIP DGI, como ante la Oficina Anticorrupción, por el año 2014 se corresponde a los bienes existentes al 31/12/2014, tanto los bienes propios como los que le corresponden como cónyuge supérstite».
«Los plazos fijos denominados fantasmas por la nota, y que corresponderían a depósitos efectuados en el Banco de Santa Cruz SA, fueron traspasados al Banco de la Nación Argentina donde se encuentran al 31/12/2014 fecha que se corresponde a la declaración jurada AFIP DGI Y Oficina Anticorrupción», completó.
En ese sentido, dijo que la nota de Clarín es «una prueba más de esta barbarie con la que nos enfrentamos, donde el odio supera a la razón, y donde entonces vemos que son más las ganas de encontrar algo que oscurezca de maldad el accionar de Cristina Fernández de Kirchner, que la verdad inmanente de sus actos, es la información de un plazo fijo en dólares informado en el expediente de la Sucesión».
Por último, el contador aclaró: «Expreso esto, porque fue dado por parte de Cristina Fernández de Kirchner a la información pública, y a modo de ejemplo ciudadano, su decisión de pesificar el depósito a plazo fijo en moneda extranjera, allá por el año 2012».
Tras reafirmar que las operaciones están reflejadas en las declaraciones juradas presentadas ante la Oficina Anticorrupción por el año 2012, Manzanares señaló que «por eso es clara la “confusión” de fechas que utiliza el Diario Clarín para fundamentar el rigor que debería haber tenido y no tuvo su nota».
«En el año 2010 sí existía dicho plazo fijo en dólares, y así fue declarado para dicho año en sus declaraciones juradas; en el año 2014 los fondos de la pesificación forman parte de los plazos fijos en pesos que se mantienen depositados».
«La intención seguramente es darle cobertura mediática, intentando entrar en la mente colectiva de nuestra ciudadanía para engañar con un manto de mentira y maldad, para continuar iniciando causas judiciales como las que tuvo el Dr. Néstor Carlos Kirchner desde que inició su mandato en el año 2003», puntualizó.