La historia continúa. Muchos se preguntaban cómo iba a seguir Homeland sin Nicholas Brody, el solado norteamericano convertido al islam del que Carrie Mathison se había enamorado. ¿Era posible pensar en Homeland sin él? Las opiniones estaban divididas, pero sus creadores decidieron que ese era el camino. Así transcurrió la cuarta temporada. En un escenario totalmente diferente, Carrie deja a lo único que le queda de Brody -la hija recién nacida que tuvo con él- en la casa de su hermana y se embarca en una nueva misión en Islamabad (capital de Paskitán). El balance de esta apuesta fue positivo. Claire Danes es la clave para entender la fuerza de la trama. Porque en el fondo, la serie pensada por Alex Gansa no se centra en una historia de amor. Ni siquiera lo hace en el terrorismo. Es un thriller psicológico, en el cual Danes y sus desórdenes producto de su bipolaridad marcan el rumbo.

Este domingo, a las 23, por la pantalla de Fox Action se podrá ver el primer capítulo de la quinta temporada, el mismo día de su estreno en los Estados Unidos. Y, como nos tienen acostumbrados sus creadores, la serie vuelve a cambiar de escenario. Todo sucederá en Berlín, donde Carrie tomará distancia de la CIA y trabajará para una empresa de seguridad privada. Alejada de Saul (Mandy Patinkin) y con Quinn (Rupert Friend) en una misión en Siria contra el ISIS, la protagonista parece estar por primera vez empezando a transitar una vida más ordenada. Pero no es su naturaleza estar lejos de los problemas. En una conferencia telefónica, el productor ejecutivo de la ficción televisiva, Gansa, habló de lo que se viene y adelantó que la situación geopolítica será abordada, pero que en esta edición habrá menos acción y más espionaje.

-¿Por qué decidieron trasladar a Carrie a Berlín?

-Todas las temporadas antes de que los guionistas arranquen, hacemos un viaje a Washington DC con Danes, Patinkin, (la directora) Lesli Linka Glatter y el productor ejecutivo y vamos a un club en Georgetown, que es una especie de guarida de espías. Ahí escuchamos lo que dicen. Es un desfile de oficiales de inteligencia, funcionarios de la Casa Blanca, gente del departamento de estado y periodistas. Eso pasa en enero y nos da un panorama de lo que preocupa a las altas esferas.

-¿Y hablaban de Alemania?

-Este año hablaban de los problemas entre la inteligencia alemana y la norteamericana. También de lo ocurrido con Charly Hebdo. Había una sensación de que Europa era un campo de reclutamiento para el Estado Islámico. Alemania era el centro de la discusión en términos de Inteligencia. Tampoco podemos olvidar lo que estaba pasando en Rusia y Ucrania que están en la puerta de al lado. Entonces, Berlín era el epicentro de lo que sucedía en el mundo en ese momento. Además, escuchamos que era una increíble ciudad de espionaje y un verdadero centro de personas que ven a Ed Snowden [el antiguo empleado de la CIA y de la NSA que filtró documentos clasificados] como un héroe y de gente que está en contra de nuestras agencias y escuchan nuestras conversaciones.

-¿Qué lugar ocuparán en esta temporada los problemas de salud de Mathison?

– Carrie es bipolar, esa lucha va a ser parte de su vida. A veces, ella tiene las cosas bajo control, otras no. En esta temporada no solo va a estar alejada de la CIA sino que va a estar trabajando en contra de la agencia. Eso será movilizante para ella.

https://youtu.be/3yBHxsTnIXg

 

Homeland se basa mucho en la actualidad en su relato, sobre todo en los problemas con el terrorismo, ¿en qué medida va a ser abordada en esta temporada la situación en Siria?

– El fantasma del Estado Islámico, lo que está pasando en Siria y los refugiados que están abandonando el país van a ser temas centrales en la temporada. También cómo los países europeos están afectados por los refugiados, a los que les tienen miedo. Siria va a ser parte del show en dos frentes: por un lado, Quinn pasó dos años en el país en un equipo de operaciones contra ISIS y, por otro, se va a tratar la historia de los musulmanes que están siendo reclutados en Europa. Creo que cuando vean la temporada se van a dar cuenta de que tiene un sabor diferente. Esta vez el show va ser más una historia de espionaje y va tener menos acción y aventura.

-¿En qué sentido Ed Snowden y lo sucedido con Charly Hebdo van a ser parte de la historia?

-No va a tener una relación directa con Ed Snowden, pero sí con el tema de sacar material de la agencia secreta y lo que significa publicar ese tipo de información. Lo mismo con Hebdo. No habrá un episodio sobre el tiroteo, pero el hecho de que Europa se prepara para más ataques es parte de la narrativa de la temporada.

-¿Cuántas temporadas más habrá de Homeland? ¿El show puede seguir sin Claire Danes?

-No sé cuánto va a durar el show. Pero estoy seguro de que habrá una sexta temporada y probablemente, una séptima. Pero no hay serie sin Claire Danes. Si ella decide que tuvo suficiente, entonces todos tuvimos suficiente. Ella es el corazón de Homeland, sobre todo después de la temporada tres. Ella lleva la serie en su espalda y lo hace de una manera grandiosa.

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