En una muestra más de periodismo militante PRO, el referente de LN+, el canal de Macri, Johnatan Viale se desvivió anoche por lamerle las botas a Patricia Bullrich que negaba la participación policial en la muerte del militante de izquierda que falleció ayer luego de una represión inexplicable en Obelisco contra un grupo de manifestantes que no cortaban el tréfico y no molestaban a nadie.

Bullrich le dedicó un buen tiempo de aire a la muerte de Morales, integrante de Rebelión Popular y sentenció que el exFARC “atravesaba una crisis de salud profunda, muy fuerte«.

La exministra de Seguridad, amiga de las botas y los palos dijo conocer la situación personal del fotorreportero que viajó a Bolivia en 2019 para cubrir el golpe de Estado.

“Yo conocí el caso de Molares. Él estaba muy enfermo cuando se produjo la transición entre Añez y Evo. Nosotros tuvimos que cuidar la Embajada Argentina en Bolivia. Muchos periodistas se resguardaron allí por el caos que había. Morales también. Estaba en una situación de crisis de salud muy profunda, muy fuerte”, sostuvo.

La referente del Pro adelantó cuál será su política represiva, dijo que “necesitamos orden para que no haya cortes todos los días y no lleven chicos y gente enferma a las manifestaciones”. “A ellos [los movimientos sociales] no les importa movilizar personas que no están en condiciones”, insistió. Y advirtió que el oficialismo “sabe que pierde y quiere desatar el caos”.

Viale la miraba obnubilado y asentía a todas sus expresiones. Tan lame-botas resultó el periodista, que hasta llegó a responderle «muy bien Patricia», a algunas expresiones totalmente desafortunadas.

Respecto al fallecimiento de Facundo Morales, Bullrich remarcó: “Me parece una barbaridad absoluta pensar que fue culpa de la Policía. Todos sabemos de la seriedad que tiene Alberto Crescenti –el titular del SAME dijo que no se habían encontrado golpes en el cuerpo del manifestante y aventuró que la muerte probablemente haya sucedido a causa de un infarto masivo, pero no aclaró si el mismo fue reducido contra el asfalto, impisiendole respirar debidamente-. Todos vimos las imágenes donde una persona detenida empezó a tener una situación de movimientos extraños en su cuerpo. No se puede poner en duda la credibilidad de los médicos”.

Tras desligar de la responsabilidad a las fuerzas de seguridad, la precandidata presidencial resaltó asimismo que ni el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, ni el Gobierno de la Ciudad “tuvieron nada que ver”. “Yo compito con Larreta el domingo pero en este momento, en esta circunstancias, estoy al lado de él. Estoy del lado del Gobierno de la Ciudad para que no lo involucren en una represión de la Policía que no tuvo nada que ver”.

Para la exministra de Seguridad, todo esto “es una estrategia”. “Ellos saben que la Argentina va a tener un cambio, que ese cambio le va a sacar poder fuerte a todas esas organizaciones que vienen viviendo del dinero y de los impuestos de la gente. No quieren perder poder y quieren sembrar miedo y caos. El día de hoy hubo otra manifestación y otro corte. Quemaron urnas en la calle. Apelan a que todo quede igual, que no les saquemos nada. En mi caso planteé una consigna clara. La Argentina va a tener orden. Eso significa que esas organizaciones no tengan más poder, no manejen más nada”, afirmó.

print