Un comisario de la Policía bonaerense, Hernan David Martín, murió ayer en lo que sería uno de los hechos de corrupción policial más impactantes de los últimos tiempos. Hay otros dos efectivos de la Policía Federal que se encuentran internados con heridas de bala.

El tiroteo en la estación de servicio Shell en inmediaciones del Shopping Avellaneda entre las fuerzas de seguridad ocurrido este viernes por la noche y que comenzó a raíz de una denuncia que hizo una mujer el jueves ante la fiscal Soledad Garibaldi que aseguró que un grupo de policías de la bonaerense la habían extorsionado para pagar un dinero o de lo contrario le armarían una causa por tráfico de drogas, terminó en un escándalo tras desnudar las mafias que operan dentro de las fuerzas de María Eugenia Vidal.

La mujer en cuestión había pagado $30 mil pero los bonaerenses le habían exigido que al otro día (por el viernes) pague otros $170 mil.

Ante la denuncia, la fiscal Garibaldi montó un operativo para hacer el pago y detener a los policías involucrados y solicitó la intervención de la División Antidrogas Urbanas de la Policía Federal.

Con la llegada de los presuntos extorsionadores, los efectivos de la Federal los interceptaron, lo que derivó en un enfrentamiento a tiros en el cual murió el comisario David Hernán Martin, de 43 años. Fue al intentar huir del lugar. Martín había sido ascendido a ese cargo en enero pasado. Su cómplice, identificado como capitán Eduardo Angel Franicevich de la DDI de Lanús, fue detenido con una importante suma de dinero.

En tanto, dos agentes de la PFA resultaron baleados y fueron trasladados de urgencia al Hospital Fiorito: uno de ellos quedó internado en grave estado con cuatro disparos (cuello, abdomen y dos en las extremidades), mientras que el otro recibió un tiro en una pierna.

Desde el lugar del hecho, el jefe de la Policía Federal, Néstor Roncaglia, detalló: «Nos dieron aviso que unas personas que podrían ser policías abordaron a una mujer ayer (jueves) y que recibieron una parte de dinero. Esos policías le pedían 170 mil pesos más que se debían entregar en la estación de servicio y se armó el operativo con doce policías alrededor de ella de forma encubierta».

El efectivo contó que la mujer se desplazó a un bar y le entregó el paquete «con plata que estaba documentada por la división Drogas Peligrosas» al capitán Franicevich, quien fue detenido luego del intercambio. En tanto, el comisario Martin que estaba con él «se alejó, se subió a un auto de la fuerza policial, embistió a un policía, fue perseguido y se produjo el tiroteo donde resultó muerto».

Sobre los dos policías heridos de la Federal, Roncaglia contó que «el cabo está vivo de casualidad». En tanto, la fiscal Garibaldi adelantó que «en la denuncia figura algo relacionado con la venta de drogas».

Por su parte, los peritajes fueron realizados por miembros de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA), ya que habitualmente es una de estas fuerzas la que evita a la otra y en este caso están involucradas ambas.

Hasta el momento no se sabe quién tiró primero y en el lugar se encuentra personal de Gendarmería con peritos balísticos para determinar cómo fue el tiroteo. A la titular de la UFI N°4 el apriete no le parece un hecho aislado. «Se citaron en un lugar público, una estación de servicio con cámaras, todo muy impune. Parece que se trata de una conducta», señaló una fuente de la investigación a Minutouno.com.

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