Los jefes de la CGT, Héctor Daer y Carlos Acuña, anunciaron ayer que, en una reunión con funcionarios del Gobierno y empresarios, acordaron el pago de un bono de fin de año por 5.000 pesos, a abonar en dos cuotas en noviembre y enero, para todos los trabajadores asalariados. Sin embargo, desde el gobierno tienen una versión diferente.

El ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica aseguró en un comunicado que ese monto no es obligatorio y que la cifra representa el tope máximo del monto conversado

Los gremialistas reclamaron que los bonos sean refrendados por un decreto del Gobierno nacional, ya que la CGT descree de la posibilidad de acordarlos con las cámaras empresarias.

«Queremos un decreto universal e imperativo», manifestó Daer, que diferenció esta negociación de la ocurrida en 2016, cuando el acuerdo de no despedir por 180 días fue incumplido por todas las empresas.

Por su parte, Acuña destacó que «lo más importante es que Gobierno y empresas se sentaron y reconocen los problemas» y que «lo que hay es un decreto del gobierno», mientras que «la vez pasada (por la negociación de 2016) fue un acta de compromiso que no cumplieron ni el Gobierno ni los empresarios».

El temor de los gremios es que muchas empresas resuelvan no pagar el bono y se amparen en la asfixia impositiva a la son sometidas por parte del Poder Ejecutivo. Daer aseguró que la central podría «reconsiderar» el paro nacional si el bono que se discute con el Gobierno se implementa por decreto y de manera obligatoria para todos los trabajadores.

Sica detalló que el acuerdo alcanzado con la CGT y representantes del sector empresario implica una “compensación extraordinaria no remunerativa” de “hasta 5000 pesos” y que esa “posibilidad” dependerá “la situación de cada sector”. De esta manera, el acuerdo, que a pedido de la central sindical se plasmará en un decreto, no obliga a las cámaras empresarias a concretar el pago del bono, pero sí establece un techo. Sica destacó el encuentro ocurrido en la sede del sindicato de Sanidad, que lidera Daer, y celebró que junto a la CGT y los empresarios “coordinen esfuerzos”.

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