Se trata del segundo incremento en lo que va de la semana. Los combustibles en las estaciones de servicio habían registrado un ajuste de hasta un 5% el domingo pasado.

Las principales cadenas de abastecimiento comenzaron a aplicar los incrementos que, en principio, iban a ser de un 3% máximo, como se había acordado cuando se produjo la suba el 1 de junio, que había sido de un 5%. Hoy, los combustibles en la petrolera estatal tuvieron un aumento adicional del 1%

Así, en la ciudad de Buenos Aires el litro de nafta Súper pasó a costar $28.11, el de Infinia se ubicó en $33.53; al tiempo que el Diesel 500 subió a $24.44 y el Infinia Diesel avanzó a $29.30, según el relevamiento de Ámbito Financiero.

TE PUEDE INTERESAR: Clima de época: por primera vez en 13 años cae la venta de combustibles

En ese escenario, la Comisión Directiva de la Asociación de Operadores de YPF, que representa a la Red de Estaciones de Servicio y distribuidores de la petrolera en todo el país, se reunió con directivos de la empresa para analizar la situación del sector.

Las dos subas de la semana se suman al del 5% autorizado por el Gobierno para el primero de junio pasado, el cual había sido acordado en mayo.

En esa oportunidad, se había establecido que el próximo aumento iba a ser en julio y de hasta 3% para todas las naftas y gasoil comercializadas en el país.

La decisión llega luego de que el ministro de Energía, Javier Iguacel, declarara tras el anterior aumento: «Les dije a los señores de YPF que juzguen y pongan el precio que corresponda. Y ellos pusieron el precio de combustible teniendo en cuenta cuidar a sus clientes y seguir invirtiendo para desarrollar el enorme potencial que tenemos».

Iguacel dijo entonces que la Argentina «tiene la nafta más barata de la región» y precisó que «en Uruguay está a 45 pesos el litro, en Brasil 38 pesos, en Chile entre 40 y 45 pesos; en el mundo es más cara».

Sin embargo, el falamante ministro no contempla que Argentina produce su propio combustible y exporta parte de su producción. Tampoco contempló en su análisis el ingreso promedio del trabajador argentino, que es sensiblemente inferior al de los países a los que hace mención. Digamos todo.

La decisión de la petrolera bajo control estatal estaría fundamentada en que sus competidoras privadas habían aplicado un incremento mayor en sus precios, por lo que este nuevo ajuste la pondría en igualdad de condiciones. También influyó el incremento (de entre 5 y 7%) dispuesto por el Gobierno en el valor de los biocombustibles.

print