Seis de cada diez habitantes del conurbano bonaerense y la Ciudad de Buenos Aires afirman que su sueldo no les alcanza para llegar a fin de mes.

Restricciones en los hábitos alimenticios, miedo a perder el empleo y pesimismo sobre el rumbo económico, son algunas de las conclusiones que surgen de un estudio del Centro de Estudios Metropolitanos (CEM).

Casi la mitad de los ciudadanos del gran Buenos Aires y la Ciudad Autónoma disminuyeron las raciones de comida durante el último año; casi un tercio tuvo hambre en el último año; más de la mitad de los encuestados considera probable perder su trabajo en el corto plazo; y también son mayoría los ciudadanos que creen que la situación económica es peor que hace un año. Los detalles desagregados según el conurbano oeste, sur y el distrito porteño se muestran en el siguiente cuadro.

El informe surge del Monitor de Clima Social (MCS) realizado de forma periódica por el CEM, el centro interuniversitario integrado por la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET); la Universidad Nacional Arturo Jauretche y la Universidad de Hurlingham. La encuesta se elaboró sobre un total de 1621 personas.

El relevamiento exhibe un deterioro del cuadro económico y social en los últimos meses. En febrero, el Monitor de Clima Social mostraba que un 37% de los consultados había reducido las porciones de comida por falta de dinero. En junio, ese porcentaje asciende a 48%. En la misma línea, mientras en octubre del 2017 el 37% de los encuestados señalaba que la situación económica era negativa, ahora la cifra alcanza el 57%.

El agravamiento de las condiciones de vida se verifica en las compras del supermercado. Según el estudio del CEM, el 74% limita lo que compra y el 76% pasó a adquirir segundas y terceras marcas. En el conurbano bonaerense, además, el 73% de los encuestados manifiesta haber reducido gastos destinados a recreación.

print