El Centro CIFRA de la CTA mostraba en sus mediciones de pobreza de 2014 y 2015 un promedio cercano al 20 por ciento: entonces, la cantidad de beneficiarios de la AUH eran 3.777.124 personas. A enero de este año, con un índice de pobreza de casi 33 por ciento, la integración de los monotributistas ascendió esa cifra a 3.980.755, sin embargo en 60 días, se redujo a 3.749.213.
Según un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), un relevamiento en varios distritos del conurbano demostró que alrededor del 20 por ciento de los alumnos abandonaron la escuela por razones como la perdida de poder adquisitivo de sus familias y la necesidad de ayudar en las casas a compensar la falta de dinero. Así se quedaron sin su ayuda social.
Con la firma de Julia Strada y Hernán Letcher, el informe que analiza la evolución de la AUH advierte que el contexto «se enmarca en la política estatal de reducción del gasto social, como la suspensión de medicamentos para jubilados, el retiro de las pensiones para personas con discapacidad, madres de siete hijos o por viudez, o las masivas suspensiones del Plan Progresar”.
Mientras tanto, desde la Anses le confirmaron al diario Página 12 que “no se modificaron los controles que se realizan de manera rutinaria para evaluar el cumplimiento de los requisitos de presentación de documentación que avale que el niño fue al colegio».
La investigación advierte que la AUH sufrió pérdida neta de poder adquisitivo en 6 puntos porcentuales, respecto de diciembre de 2015. Además pone de manifiesto la mentira del entonces anuncio del Presidente cuando se incluyó a los hijos de monotributistas, con su respectiva flexibilización de contratos laborales: mientras Macri habló la inclusión de 514 mil niños y niñas, las cifras oficiales evidencian un total de 318.163 a la fecha.
