Federico Sturzenegger
Federico Sturzenegger, expresidente del Banco Central

El titular del Banco Central goza de un optimismo envidiable. Según sus pronósticos, el resto del año la inflación se acomodará en torno al 1%, en caso de apuntar a terminar el año con un máximo de 17 puntos. Pensar en lograr la meta del 12% no sería optimismo, sino demencia.

Según el especialista en proyecciones económicas, «por los buenos números de diciembre y enero, cuando la inflación núcleo fue de 1,3 por ciento, hubo cierta relajación de la política monetaria que la corregimos en marzo y la semana pasada (cuando subió la tasa de política monetaria a 26,25 por ciento)».

«Debemos desafiar la hipótesis de que la desinflación tiene costos en el nivel de actividad»

Tan optimista esta Fede que se lanzó a decir que de acuerdo a indicadores propios, «la economía argentina creció 0,7 por ciento en el primer trimestre del año». Habría que agregar que son ‘indicadores propios de un ciego», porque la realidad es que todo aumenta, no se vende y las Pymes estan cerrando a razón de una veintena por día. Una locura!

En referencia a la pauta inflacionaria de 17 por ciento para todo el año, Sturzenegger indicó que «la meta es factible y uno tiene que tomar las acciones concordantes» para cumplirla, al tiempo que subrayó que «es factible y cumplible».

Clarín Inflación
Lo dice el gran diario argentino

En el norte no estarían viendo el mismo panorama que el banquero, sucede que el FMI corrigió las metas inflacionarias para a Argentina y las colocó por encima del 21%, además le bajó el precio al crecimiento proyectado para el país.

Un periodista atrevido se lo mencionó y Sturzenegger le respondió: «Qué te puedo decir del Fondo…» y dejó la respuesta abierta.

Animado, el hombre insistió, «no pensábamos que íbamos a tener que dar este debate en la Argentina y volver a explicar los beneficios de bajar la inflación, pero aquí estamos y lo vamos a hacer», enfatizó el titular de la autoridad monetaria al iniciar la conferencia de prensa sobre «Informe de Política Monetaria» y en clara referencia a deliberado enfriamiento de la economía y la política de suba de tasas que tanto provecho le hace a los capitales golondrina, la única inversión que llovió en el país.

Sturzenegger afirmó que «bajar la inflación es la mejor forma de reactivar la economía» porque «ayuda al crecimiento, favorece la distribución del ingreso al quitar un impuesto sobre los más desprotegidos y provoca que reaparezca el crédito».

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