Gabriela Michetti, vicepresidenta de la Nación

La tomada de pelo es áspera, desde el gobierno se burlan descaradamente de la opinión pública con las declaraciones que vienen haciendo los funcionarios en relación al bochornoso acuerdo que condona una millonaria suma de dinero a las empresas de la familia presidencial. Ahora, la vicepresidenta pretende instalar la idea que Macri «no sabía del acuerdo» que podría costarle miles de millones al erario nacional.

«Para el gobierno y para el propio presidente es mejor que esto quede absolutamente claro, que esto está bien hecho, en el marco de lo judicial y no había ninguna cosa de prebenda o favoritismo», transmitió.

Asimismo, la vicepresidenta enfatizó que «no tiene que caber ninguna duda que nuestro gobierno brega, lucha y va a tener como herramienta fundamental procesos transparentes y siempre tratando de que las cosas sean lo más claras posible, estén sobre la mesa y no se hagan acuerdos o cosas ocultas a la población».

Para Michetti, la negociación por la deuda que el grupo encabezado por Franco Macri, padre del presidente, tenía con el Estado por la concesión del Correo Franco «es un proceso que se da en un marco del Poder Judicial».

En este contexto, la vicepresidenta remarcó que el acuerdo «no se hizo a escondidas ni en negociaciones que estaban hechas por funcionarios con empresarios» e incluso señaló que forma parte de una dirigencia judicial que incluyó a más de 600 acreedores del Correo Argentino.

«En ninguna de las reuniones que tratamos diariamente los temas de todas las áreas nunca se habló de este tema», insistió la vicepresidenta para desvincular a Macri.

Incluso subrayó que «en este gobierno, la decisión del presidente ha sido superclara en que los temas van en los marcos institucionales que tienen que ir».

Por eso, Michetti insistió en que el acuerdo por la deuda del Correo «se manejó el tema en el marco de la institución que se tenía que manejar» y «se actuó como se debe actuar sin tener diferencias».

«Es bastante razonable que la Oficina Anticorrupción, para que no queden dudas, intervenga» -en realidad es obligación que lo haga- «y si la fiscal quiere abrir un proceso para mirar lo que pasó con esas negociaciones que lo haga y que la justicia lo revise, me parece perfecto», expresó.

Al respecto, Michetti garantizó que «no va a haber ninguna defensa por encima del interés que cualquier empresa podría haber tenido en este caso».

«Nunca se va a tocar porque esto es de la familia del presidente de manera distinta o se va a hacer de manera distinta que cualquier otra empresa», resaltó, por último, la vicepresidenta.

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