El líder opositor y gobernador de Miranda, Henrique Cariles junto a la la dirección nacional de Primero Justicia.

Flanqueado por el diputado Julio Borges, jefe de la bancada de la MUD en la Asamblea Nacional, y por el secretario general del partido, diputado Tomás Guanipa, en un tono enérgico, pero más reposado que sus últimas alocuciones a través de las redes sociales, Capriles dejó claro a sus seguidores que “¡El Referendo Revocatorio no está muerto, está secuestrado por el Gobierno! ¡El RR es del pueblo, artículo 72, no es de la MUD! ¡Está secuestrado! ¡Ténganlo claro: se-cues-tra-do!

El dirigente, principal impulsor del RR, exigió al oficialismo que, o presentan el viernes un cronograma electoral que incluya la fecha para las elecciones generales propuestas por el Gobeirno o la reactivación de la recabación de las firmas del 20% para el RR.

Desde el galpón aledaño al Parque Miranda, Capriles inició su declaración de una hora -transmitida por las redes sociales- reconociendo errores de comunicación recientes de él y de la coalición y ofreció disculpas por eso. “Espero que la comunicación sea fluida, que la gente sepa minuto a minuto para dónde vamos”, dijo sobre lo que se espera de la Mesa de Diálogo instalada con el acompañamiento de El Vaticano.

Capriles reiteró algunos aspectos principistas de su postura, como el carácter pacífico de la lucha y el rechazo a cualquier salida para cambiar al Gobierno que no pase por elecciones. “Somos gente de buena fe y no tenemos que sentir vergüenza de decirlo”. Insistió en que fue el Gobierno el que dio “un golpe judicial” al impedirle a los venezolanos su derecho al sufragio.

Recordó que fue la MUD la que invitó a El Vaticano como mediador en el conflicto con el Gobierno. En lo que fue una alusión directa a de Voluntad Popular Capriles reclamó coherencia. VP se negó a incorporarse a la mesa y rechazó su rechazo a la suspensión de la marcha hacia Miraflores.

“Si usted va y se toma una foto con el Papa, si el Papa le está diciendo algo, entonces lo lógico es que usted le dé la oportunidad a su iglesia y la cabeza de su Iglesia. Sé que el Papa está genuinamente interesado en ayudar a los venezolanos, no a Maduro”.

En lo que es una rectificación de su propio discurso, proclive a estigmatizar el verbo “negociar”, Capriles señaló: “La negociación no significa negocio”.

Expresó también críticas sobre la forma cómo se instaló le Mesa de Diálogo el domingo 30. “Maduro no tiene porqué presidir esa mesa, nosotros somos una parte. Si él quiere ir a la reunión, él tiene que ir del lado de su parte. Esa reunión tiene una agenda. No vamos a darnos palmaditas ni a sacarnos fotos”.

En la lista de exigencias que presentó para ser satisfechas el viernes, Capriles incluyó la apertura de un canal humanitario para el ingreso al país de medicamentos y alimentos; que se acepte la designación de dos nuevos rectores del CNE, de modo que a partir del 4 de diciembre haya “un nuevo CNE”, que se resuelva la situación de los diputados electos por Amazonas -no descartó la repetición de esos comicios-, la liberación de los presos políticos y, como último punto, la incorporación a la Mesa de Diálogo del ministro de la Defensa, general Vladimir Padrino López, “como garante” de los acuerdos que allí se alcancen.

“Si ellos son los garantes de la soberanía, que estén allí vigilantes de los acuerdos que se generen. Nosotros respetamos al FAN. Una cosa es la FAN y otra la cúpula… Si ese es representante de la cúpula, más aún para que no pueda desconocer por aquello de las jerarquías”, dijo el gobernador sobre el general Padrino.

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